Al feminismo le da igual, pero los chicos se nos están quedando atrás (fracaso escolar)
En los países de la OCDE, seguía Stewart-Williams, el 66% de las mujeres entraron en la universidad en 2009, frente al 52% de los hombres, y esta brecha ha ido aumentando. En Europa, el 43% de las mujeres de 30 a 34 años completaron la educación terciaria en 2015, en comparación con el 34% de los hombres en el mismo rango de edad. Lo que resulta en 4,4 puntos porcentuales en los últimos diez años. ¿Podría ser que hubiera un sesgo en la forma tratar los profesores a sus alumnos en función del sexo?
Pues eso se deduce de un estudio en Science Direct de la economista Camille Terrier Boys lag behind: How teachers’ gender biases affect student achievement (Los niños se quedan atrás: cómo los prejuicios de género de los docentes afectan el rendimiento de los estudiantes»).
8M: las tornas están cambiando aunque el feminismo hegemónico no quiera verlo. Será que ninguna de las que sale con la pancarta tiene hijos.
También lo cree William Collins que en su libro La brecha de empatía declara que la discriminación hacia los hombres (por parte de ambos sexos) es «aterradora»: «Los hombres y los niños están en gran desventaja en muchas áreas de la vida, incluida la educación, la atención médica, la integridad genital, la justicia penal, el abuso doméstico, las horas de trabajo, los impuestos, las pensiones, la paternidad, la falta de vivienda, el suicidio, los delitos sexuales, y el acceso a sus propios hijos después de la separación de los padres».