A mi amigo Pere - La táctica del avestruz
Como ya se sabe, el avestruz esconde su cabeza bajo tierra para sentirse a salvo. No dudará en darte una patada si se siente amenazado o huir a toda velocidad (a 60 Km/h si no me falla la memoria) si se presenta un enemigo que resiste a esos encantos.
He de hacer un inciso: explorar el interior de las personas, leer su lenguaje corporal, y deducir qué se realmente quiere decir alguien con sus actos es algo que se me ha dado relativamente bien. Hay signos, pequeñas inclinaciones de cabeza, actitud condescendiente, reafirmación, forma de mirar, que son señales de lo que nuestro interlocutor quiere realmente decir con sus palabras.
Mi amigo Pere es independentista, y usa esa táctica a menudo. Gritará y protestará por los políticos presos, dirá que los suyos son los buenos y que el hecho de que les roben, estafen, y apliquen política de palo y zanahoria está bien, porque todo tiene como meta llegar a la república de la piruleta, y ya ajustarán cuentas con los chorizos. Mi amigo Pere tiene miedo y rabia; le es más fácil retirar la palabra y etiquetar de fascista a quien no piensa como él, dado que ataca a su identidad y por tanto se niega a su persona si se cuestionan sus argumentos.
Pregunta capciosa: ¿cómo se construye una identidad personal a partir de una bandera y un trozo arbitrario de terreno? Veamos, indaguemos en esto: repasamos el argumentario y encontramos el "es un sentimiento", "siempre ha sido así desde tiempos pretéritos y menetéritos", "vivimos en tierra ocupada por un invasor", "tenemos costumbres e idioma diferente". Mi amigo Pere tiene una ascendencia tan distinguida que podemos remontarnos a centro europa por un lado, Oriente Medio por otro, y Asia central en cierta medida, luego ¿dónde está el invasor? Vive en él, teniendo en cuenta que esta tierra ha sido arrasada en distintas épocas y por distintos invasores, invasores que perviven en él a través de los tiempos. Pero no, no puedo explicar a mi amigo que todo eso te moldea, pero no te define.
Bien, vayamos a la raíz del problema: ¿qué tiene de especial haber nacido en un lugar o época, hablar una lengua u otra, ser blanco, negro, gitano? Absolutamente nada. Pero al final lo que te define es lo que te hace sentir bien, así que: ¿qué hay de un auxiliar administrativo que se sacó la licenciatura en biología y nunca ejerció su profesión? ¿O la actriz que lleva 3 años sin pisar un escenario o un plató de cine? ¿Es lícito definir a alguien por como lo vemos o por cómo se ve? La desgracia de una mente inquisitiva es que al final la mayoría gana, así que Pere necesita refuerzo para su idea, y ahí entra la propaganda que ha bombardeado al terruño durante las últimas décadas.
Göbels cimentó las bases de los mecanismos de aceptación de las patrañas que se han estado soltando, pero yo apelo a la responsabilidad personal, porque por mucho que te repitan algo no va a ser verdad, porque si justificas una mentira poniendo la responsabilidad en otro o excusándote acerca de los motivos que te llevan a tus acciones, entonces la falta de sinceridad acaba delatando la simple y llana falacia, mentira, obvio auto engaño que implica reafirmación y refuerzo del grupo para justificar las acciones personales. Y cuando hablamos de la insoportable levedad de los argumentos proindepes... Maldita hemeroteca.
Bien, y pasamos del pobre Pere, el cual estará preguntandose qué me lleva a hablar de él, y al mismo tiempo a reafirmarse en su aislamiento y pensamiento de grupo. ¿Es el efecto Dunning-Kruger? ¿La mística y ritual de cancioncillas y eslóganes (els segadors, in-inde-independencia, chordis go home, UE SHAME ON YOU)? ¿Puestas en escena elaboradas como las vistas durante las perfectamente organizadas manifestaciones? Me lleva a pensar, a parte del consabido "¿de dónde sale la pasta para esas movidas?", en los ingentes recursos que la maquinaria de propaganda pro-indepe ha puesto a disposición de la causa, me lleva a pensar que la alucinación colectiva y el refuerzo emocional hace que el pobre Pere no sea sino una marioneta de gente que tiene perfectamente estudiado el asunto, para que mire a donde toca. Ahora haz esto, salta, grita, vota, ahora no votes, ahora sí pero no, ahora Puigdemont facha, ahora Puigdemont exiliado político y legítimo presidente de la república de la piruleta. La pasta ya ha sido estimada en 880 Millones de euros. ¿De donde han salido? De tu bolsillo, Pere, y del mío. La diferencia entre tú y yo es que lejos de estar indignado por el robo del dinero público no te falta un amigo, y ¿por qué ibas a mejorar la sanidad y la educacion entre otras cosas habiendo independencia? A diferencia de mi, no te sientes estafado, aun diciendote que era imposible, sino que lo apruebas y perpetúas. Me han robado un amigo, sí, una persona con la que podía dialogar, y tomarme una caja de quintos si se terciaba. Y eso me cabrea, porque la pasta es fungible y hasta cierto punto ficticia; de amigos no voy sobrado.
Hay muchos Peres, desgraciadamente.