Ignominia: Historia de un dislate que fue demasiado lejos
Muchos estamos ya cansados del asunto del prusés, y en mayor o en menor medida lo hemos apartado del día a día, una indiferencia que denota la irrelevancia de cualquier acción o decisión que la Generalidad Catalana y su cohorte de enchufados e incompetentes cientoypicodemil de euristas pueda tomar, dado que ha quedado claro que gobiernan por y para ellos, y que no se puede contar con la institución para nada salvo para declaraciones huecas e inacción total. Pero, ahora que estamos acercándonos al 1-O, tenemos al niño del pastelero reclamando su dosis de casito, y un bonito panorama de…