Se acerca el invierno a Menéame

Dado que estas semanas están de moda las referencias a Juego de Tronos, yo creo que Menéame es como los Siete Reinos: tiene muchas disputas internas por razones legítimas, pero ignora la gran amenaza. No creo que sea el primero que lo observe, pero ¿qué utilidad tiene Menéame? Unos se informan, otros promocionan y forman una comunidad en la que relacionarse. Esto ha sido así durante años y no ha cambiado. Ahora bien, ¿sigue haciendo todo eso igual de bien?

Hace mucho, Menéame tenía una ventaja para informarse: podías ver cosas de las que no informaban otros medios y además te enterabas mucho antes de las noticias. Creo que toda la época del 15M, la crisis y los casos de corrupción fue donde Menéame fue el máximo exponente en este aspecto. Además de esto, no tenías que estar pendiente de la televisión, ni de los periódicos, y los comentarios, aunque no eran tan buenos como la nostalgia les hace recordar a algunos, eran útiles. Es más, incluso antes de esta época era habitual ver traducciones completas en los comentarios de los artículos enlazados. Estos solían votarse y animaba a otros a repetirlo. Sin embargo, el algún momento dominó la idea de que no hacía falta, que si no lo entendías es que no le ponías ganas y las típicas reflexiones sobre España y los idiomas. Este punto quizás vaya más allá de la propia Menéame y tenga que ver con un internet donde se contribuya desinteresadamente con menos frecuencia.

Personalmente, aunque tampoco es que haya estado registrando todas las incidencias, creo que Menéame empeoró a partir de octubre de 2014, coincidiendo con los casos de Monedero y Errejón así como la ley de propiedad intelectual. No porque empeorara inmediatamente el contenido, sino porque noté que la comunidad se llenó de usuarios nocivos. No es que quiera mitificar la etapa anterior, pero no veía esa actividad coordinada (en todo caso, para votarse mutuamente, ya que antes me solían llegar privados para que lo hiciese...y nunca les hice caso). Tampoco sé si eran usuarios nuevos u otros antiguos que manifestaban su rechazo a Podemos, a las noticias sobre corrupción y al boicot. No es que esperase que todos pensaran igual, pero sí era evidente como votaban negativo en grupo simplemente lo que no les gustaba sin atenerse a las normas (votos como irrelevante o cansina son proclives a usarse como salgan de los huevos). Al final creo que cualquier envío era susceptible de recibir una ración de negativos sin razón, y esto ha perjudicado a la web.

Volviendo a la pregunta inicial, ¿qué utilidad tiene menéame y cuán efectiva es su labor? A día de hoy no es inútil, pero tampoco destaca en nada. Sí, recibir 6000 o incluso más de 10000 visitas en un artículo, vídeo o entrada en un día no está mal, pero sin la influencia que tenía antes sobre otras webs para que fueran enlazando, tampoco tiene el mismo impacto. Además, la aplicación de las normas es una locura. P.ej. Tienes una web y la competencia menea un contenido tuyo a las 3 de la mañana. Como es natural, no la vota ni el Tato. Ahora ese contenido no puede ser meneado nunca más. Lo mismo ocurre generalmente si hace X años se publicó algo relacionado o si alguien siempre envía un puñado de cosas para ganar karma y empuja sus propios meneos a la segunda página. Si estas son las normas de Menéame, perfecto. Pero, ¿para qué compartirlo en Menéame si en Twitter, p. ej., no existen esas limitaciones?

Menéame ha dejado de ser un lugar donde descubrías cosas antes que en otros sitios o donde se ve un contenido diferente. Hasta mi madre que no es muy ducha con las tecnologías se entera antes de las noticias por Facebook (el que en Menéame llevan años diciendo que se va a morir) que yo por Menéame. Si miramos webs como Twitter o Flipboard, y muchas otras que habrá, nos daremos cuenta que el contenido es el mismo que se muestra en Menéame. La diferencia que tiene Menéame es que los negativos hacen una criba y a la portada llega la mitad. ¿Qué usuario de internet va a estar interesado en ver lo mismo que en todas partes, más tarde y tras pasar un filtro que no ha elegido él?

Además, siendo el único portal de su tipo en español que no está limitado a una temática (aparte de Mediatize, por supuesto), me parece desaprovechado como apenas sale algo que no sea Madrid. Sobre Madrid es relevante la política, la contaminación, los accidentes de tráfico e incluso si colocan unos bancos en una plaza. En el resto de España, y ya no digamos de los paises hispanos, lo relevante es algún asesinato puntual, la corrupción o, en casos especiales, alguna información turística.

¿Qué ofrece Menéame? ¿Cómo compite con otras webs? Aunque estoy a favor del boicot, la idea de que los periódicos iban a desaparecer era ilusa. Simplemente se han adaptado a otras plataformas con menos limitaciones. Siempre se habla de ponerle puertas al campo, pero Menéame es un campo con puertas, alambre de espino y un pelotón patrullando. Es un entorno hostil que no parece capaz de recuperarse.