Pues si es verdad, me parece vergonzoso por parte de los jugadores. Un líder político te puede caer mejor, peor, o directamente te puede parecer despreciable. Puedes tener una posición personal contraria, o puedes tratarle con la frialdad que le trató Carvajal, no le veo problema.
Pero cuando te pones la camiseta de la selección española, deberías tener clarísimo que eres un representante de un país, y ese señor es el presidente democráticamente elegido de tu país. Hay un porcentaje nada despreciable de españoles que ha decidido que ese señor le representa mejor que los demás políticos y la selección debería ser de todos los españoles, no solo de unos pocos.
Cada jugador representa a TODOS los españoles y no eres quien para decidir quién te entrega la copa o para echar pulsitos a nadie. Esas actitudes únicamente los señalan como niñatos millonarios y caprichosos desde mi punto de vista.
#7 Yo entiendo que puedas hacer un gesto que demuestre tu malestar, no dejamos de ser personas y debemos tener la libertad de expresar nuestra disconformidad con un político o un gobernante. Lo de Carvajal me parece que entra dentro de esa libertad de expresión: acudió al acto, dio la mano al político y dejó patente su disgusto. Perfecto, desde mi punto de vista.
Pero una cosa es eso, y otra es creerte con derecho a definir protocolos o a decidir quién te entrega o no la copa. Un representante español no puede hacer eso.
Un funcionario tiene que jurar o prometer su cargo y las obligaciones del mismo con sometimiento al ordenamiento jurídico y al Rey, como persona que ostenta la jefatura del estado conforme a la Constitución. Y puedes ser todo lo republicano que quieras, pero lo tienes que firmar, porque desempeñas unas funciones públicas, prestas servicio a todos los ciudadanos y si quieres saltarte el acto protocolario de la recepción real, pues perfecto, a nadie le importa un carajo y haces un gesto íntimo de desprecio a la monarquía. Pero tu jefe del estado es el rey, lo marca la ley, y tú lo acatas. Cuando cambie la ley, pues acatarás otra cosa, si es que cambia.
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Pero cuando te pones la camiseta de la selección española, deberías tener clarísimo que eres un representante de un país, y ese señor es el presidente democráticamente elegido de tu país. Hay un porcentaje nada despreciable de españoles que ha decidido que ese señor le representa mejor que los demás políticos y la selección debería ser de todos los españoles, no solo de unos pocos.
Cada jugador representa a TODOS los españoles y no eres quien para decidir quién te entrega la copa o para echar pulsitos a nadie. Esas actitudes únicamente los señalan como niñatos millonarios y caprichosos desde mi punto de vista.
Pero una cosa es eso, y otra es creerte con derecho a definir protocolos o a decidir quién te entrega o no la copa. Un representante español no puede hacer eso.
Un funcionario tiene que jurar o prometer su cargo y las obligaciones del mismo con sometimiento al ordenamiento jurídico y al Rey, como persona que ostenta la jefatura del estado conforme a la Constitución. Y puedes ser todo lo republicano que quieras, pero lo tienes que firmar, porque desempeñas unas funciones públicas, prestas servicio a todos los ciudadanos y si quieres saltarte el acto protocolario de la recepción real, pues perfecto, a nadie le importa un carajo y haces un gesto íntimo de desprecio a la monarquía. Pero tu jefe del estado es el rey, lo marca la ley, y tú lo acatas. Cuando cambie la ley, pues acatarás otra cosa, si es que cambia.