¡Deja ya de tocar, hostia! No se lo dices así porque es tu amigo, pero de verdad, que llega un momento en que no lo soportas más, ¿nos estamos volviendo gilipollas o qué nos pasa? ¡Iros/idos/íos todos a tomar por culo, ya! (R. A .E. incluída)
¡Así va el país!
Ya, ya veo,,, Mira, esto es como cuando en los 90 tus padres te compraban una TV (de tubo, por supuesto, no había otra), marca BLUEsky para que pudieras conectar tu sistema personal de videojuegos en la intimidad de tu cuarto y así dejaras de pelear por querer usar la TV del salón y tus colegas te decían "no está mal, algo es algo, al menos enciende", vamos, un mojón catódico: tú lo sabías, ellos lo sabían y a tus padres les daba igual si la textura RGB de tu juego favorito se veía como el culo. Pero entonces, de repente, pasan 30 años (bueno, no tan de repente, pero vaya) y un buen día viene a tu casa un... bueno, un friki, un tipo (bueno, va, en realidad es un viejo amigo, pero da igual), y ve la susodicha en un rincón cogiendo polvo y te suelta "Joder, tío, ¿tienes 'esto' aquí? ¿Pero qué maravilla es esta? Con sus botoncitos y todo", ¡clic!, ¡clic! ¡clic!