Google y Whatsapp no hacen más que confirmar que todo lo que los usuarios envían a través de sus sistemas se lo guardan para el uso que en su momento consideren darle. Si un usuario usa esos servicios para asuntos de extrema confidencialidad, es que ni es muy listo, ni tiene gente útil que le asesore. Siendo, además un funcionario de ¿justicia? debería ser duramente sancionado, haya cometido delitos o no.
Luego que si Pegasus...