#1 No tiene ninguna causa abierta.

Es más: la justicia italiana tras un análisis exhaustivo ha dicho que Juana es incapaz de comprender el estado emocional de los niños y absolutamente inconsciente del daño psicológico que les ha causado.

Os pego lo que cuentan en el libro "Algunos Hombres Buenos"

Para Iesu, Juana Rivas «muestra un funcionamiento psíquico severamente patológico, asociado con una desorganización del pensamiento: en la narración se pierden los vínculos lógicos y temporales, factor no atribuible a la falta de comprensión lingüística porque la señora responde correctamente a la pregunta formulada, pero perdiendo el nexo lógico temporal. Manifiesta una importante labilidad emocional y grandes habilidades manipulativas en perjuicio de los menores».
«La señora Rivas muestra una personalidad compleja, basada en una emotividad lábil, falta de examen de la realidad y tendencia a proponer seductoramente vínculos simbióticos. Se identifica ciertamente en el papel de víctima de violencia de género, pero, lamentablemente, aun aceptando su experiencia como mujer maltratada como real y veraz, actuó con la misma violencia al arrebatarle a sus hijos al padre, triangulándolos en el conflicto y presentándole como un padre aterrador. Ha fallado en proteger a los niños del padre y de ella misma, de su propia fragilidad psíquica, explotándolos.
»La madre, a sabiendas o sin saberlo, favoreció la estructuración de un proceso de alienación de la figura paterna durante el año que tuvo al hijo mayor.
»La señora Rivas ciertamente no protege el acceso de los hijos al otro progenitor [...]. Es absolutamente inconsciente del daño psicológico que generó en ellos al separarlos de su padre por un año: al pedirle comentar el estado psicológico de los niños entre mayo de 2016 y agosto de 2017 [cuando los retuvo en España], estableció que los menores de edad no tenían dificultades y estaban bien. Demostró ser incapaz de comprender el estado emocional de los niños, pero sobre todo de captar una condición psíquica diferente a la suya».
«En sus historias ha expuesto una serie de episodios insólitos, no confirmados por ninguna de las personas involucradas [...]. Además, mostró grandes habilidades manipulativas en detrimento de los menores. Por ejemplo, en presencia de la escritora [iesu se refiere a sí misma] comunicó a los niños que los psicólogos eran “amigos” de la madre, ofreciéndoles una mistificación de la realidad [...]. La Sra. Rivas también demostró ser incapaz de comprender las profundas necesidades de sus hijos.
»Todas las personas involucradas en el proceso, maestras de italiano, pediatra de libre elección y educadora, del municipio de Carloforte, describen al padre como cariñoso y atento con sus hijos y, en cambio, a la madre como ausente en la vida real y cotidiana de los menores».
«Dadas las premisas anteriores, se cree que la Sra. Rivas tiene gravemente socavada su competencia parental: su enfoque no parece [situado] en los niños, sino en la violencia de género».