#1 Depende, ¿cuantos farmacéuticos fallarían descifrando ese mensaje? ¿Y si son ellos los no preparados? ¿Confías en tu farmacéutico? ¡Hazle el test del nolotil para saber si sabe o si es un palangana!
#4 Los farmacéuticos valientes se la juegan. Será que no ha habido casos de abueletes que se han llevado un poderoso laxante en lugar de la viagra de turno por culpa de la letra del médico... O de la mala leche del farmacéutico o farmacéutica...
#2 En Andalucía hace años que eso de las recetas en papel se acabó. El médico te mete las recetas en tu tarjeta sanitaria y en la farmacia meten la tarjeta y ya saben lo que te tienen que dar. Incluso te ponen la duración del tratamiento y se sabe cuántos meses tienen que darte ese medicamento
#14 Un matrimonio de gallegos va al médico, que le receta unos supositorios a la mujer. Al salir, se ponen a hablar entre ellos:
- Oye Manolo, ¿Qué es un supositorio?
- Pues la verdad es que no lo sé.
- Y entonces ¿Cómo los voy a usar?
- Pues no sé. Mira, lo mejor es que entremos otra vez y se lo preguntemos al medico, que debe saberlo.
- No, hombre, no, que se va a enfadar.
- ¡Qué se va a enfadar! Anda, mujer, no seas tímida.
Total, que vuelven a entrar y la mujer le pregunta al médico:
- Esto... ¿nos podría decir cómo se usan los supositorios?
- Sí, claro. Tiene que sacarlos del envoltorio, con un poco de cuidado para que no se rompan, y metérselos por el culo.
- Ves, Manolo, ya te dije que se iba a cabrear.
#15 Yo me sabía el de
- ¡Hombre Paco, qué tal te fueron los supositorios que te receté la semana pasada?
- Puag, qué mal sabían. Para lo que me hicieron me los podía haber metido por el culo.
*
El coño tiene todo el sentido del mundo, el pobre médico estará cansado de que el farmacéutico le llame para preguntarle que recetó...
Edit: #13 te me adelantaste.
- Oye Manolo, ¿Qué es un supositorio?
- Pues la verdad es que no lo sé.
- Y entonces ¿Cómo los voy a usar?
- Pues no sé. Mira, lo mejor es que entremos otra vez y se lo preguntemos al medico, que debe saberlo.
- No, hombre, no, que se va a enfadar.
- ¡Qué se va a enfadar! Anda, mujer, no seas tímida.
Total, que vuelven a entrar y la mujer le pregunta al médico:
- Esto... ¿nos podría decir cómo se usan los supositorios?
- Sí, claro. Tiene que sacarlos del envoltorio, con un poco de cuidado para que no se rompan, y metérselos por el culo.
- Ves, Manolo, ya te dije que se iba a cabrear.
- ¡Hombre Paco, qué tal te fueron los supositorios que te receté la semana pasada?
- Puag, qué mal sabían. Para lo que me hicieron me los podía haber metido por el culo.