Independientemente de los problemas que haya tenido anteriormente con este usuario, su trabajo es sacar la rampa para permitirle acceder al vehículo. Para mí su actuación es indefendible y debe ser expedientado.
#1 Depende. Ir en silla de ruedas no es sinónimo de ser un ser de luz. Imaginemos que el hombre pedía la rampa y luego nunca la cogía, o entraba siempre sin pagar el billete. ¿Tiene el conductor que otorgarle el beneficio de la duda en cada viaje?
#5#6 No tengo claro que no funcione, salvo que la puerta no funcione, pero la rampa si.
El langui tambien la lio bien un vez bloqueando el autobus. Si a nostros nos molesta esperar al autobus, a los que tienen que esperar uno especial y cuando llega no funciona, mas todavia.
Falta contexto, para saber quien tiene razon en el conflicto.
Un periodista, iria a preguntar a los implicados para que diesen sus versiones.
#1 La rampa no funciona. Se lo explica una y otra vez y el otro sigue dando por el culo. En el vídeo se ve como saca la rampa pero la puerta no se abre, cuando debería ser algo simultáneo. Al poco tiempo la rampa vuelve a retraerse.
#6 El conductor ha metido la pata zarandeando al otro.
Por lo que se ve, el de la silla de ruedas no era precisamente un angelito. Ya había liado varias. Así vendría ya de "caliente" el conductor. Pero el zarandeo con alguien que no puede defenderse es una cruz, sin duda.
Lo que no entiendo es cómo no ayudaron los pasajeros a subirse al hombre, en un momento el problema estaba resuelto.
#7 Nota que el sillaruédico estaba aguantando la puerta impidiendo que el autobús pudiera continuar su marcha.
Si un par de pasajeros lo suben con la silla, luego haría falta otro pasajero al menos para bajarlo del autobús, ¿y si cuando ha de bajar no lo hay? Por otro lado, me da la impresión de que el pasajero trampista quería subir por la rampa sí o sí, es posible que se hubera negado a otro arreglo.
noes normal.*
El langui tambien la lio bien un vez bloqueando el autobus. Si a nostros nos molesta esperar al autobus, a los que tienen que esperar uno especial y cuando llega no funciona, mas todavia.
Falta contexto, para saber quien tiene razon en el conflicto.
Un periodista, iria a preguntar a los implicados para que diesen sus versiones.
Por lo que se ve, el de la silla de ruedas no era precisamente un angelito. Ya había liado varias. Así vendría ya de "caliente" el conductor. Pero el zarandeo con alguien que no puede defenderse es una cruz, sin duda.
Lo que no entiendo es cómo no ayudaron los pasajeros a subirse al hombre, en un momento el problema estaba resuelto.
Si un par de pasajeros lo suben con la silla, luego haría falta otro pasajero al menos para bajarlo del autobús, ¿y si cuando ha de bajar no lo hay? Por otro lado, me da la impresión de que el pasajero trampista quería subir por la rampa sí o sí, es posible que se hubera negado a otro arreglo.