El caso de las hermanas que mataron a su padre abusador sacude Rusia

Cuando aquella tarde de verano Mijaíl Jachaturián llegó a casa, en Moscú, se enfureció. Ese día, fue porque consideró que el salón estaba desordenado. El día anterior el motivo había sido otro. Furibundo, llamó por turnos a la sala a sus hijas, Krestina, Angelina y María. Y las roció con un espray de pimienta que tenía preparado. Después, procedió a dormir una siesta. Las chicas, de 17, 18 y 19 años, no aguantaron más. Empezaron a golpearle con un martillo y un cuchillo de cocina, según la Fiscalía, al despertar una lo apuñaló hasta matarlo.