20 libros que deberías leer solo porque los prohibieron en pleno siglo XX
Ya sabes lo que se dice: basta que se prohíba algo para que sintamos cierta propensión a probarlo. Además, cuando se trata de prohibir o escamotear la atención sobre determinado asunto, muchas veces acaba produciéndose el efecto contrario gracias al llamado efecto Streisand.