@rogero @inconformistadesdeel67 El amigo inconformista ya ha dado en parte con la clave, teóricamente tanto los políticos como los medios están para servir a la gente, y con el teatrillo que tienen montado, así lo parece. Pero en realidad ambos poderes (politico y periodismo , quizá el judicial y legislativo también) obedecen a grandes empresas y grandes 'patrocinadores'.
Supuestamente la izquierda es la defiende a la clase trabajadora. Pero en la crisis de 2008 nos dejaron tirados, con la crisis del coronavirus nos han vuelto a dejar tirados, pero no solo eso, nos están vendiendo. Vendiendo nuestros datos, nuestra privacidad, vendiendo nuestras libertades individuales y nuestras conquistas sociales pasadas, como puro mercadeo.
Solo los que somos capaces de discernir, lo podemos observar perfectamente, sin distorsión. Pero está sucediendo. La izquierda ha vendido a sus representados, al capital. Pero les mantiene agilipollados con toneladas de entretenimiento, leyes sobre género totalmente chorras, lenguaja inclusiva, estúpidas leyes medioambientales que no cambian gran cosa.
Supuestamente la izquierda es la defiende a la clase trabajadora. Pero en la crisis de 2008 nos dejaron tirados, con la crisis del coronavirus nos han vuelto a dejar tirados, pero no solo eso, nos están vendiendo. Vendiendo nuestros datos, nuestra privacidad, vendiendo nuestras libertades individuales y nuestras conquistas sociales pasadas, como puro mercadeo.
Solo los que somos capaces de discernir, lo podemos observar perfectamente, sin distorsión. Pero está sucediendo. La izquierda ha vendido a sus representados, al capital. Pero les mantiene agilipollados con toneladas de entretenimiento, leyes sobre género totalmente chorras, lenguaja inclusiva, estúpidas leyes medioambientales que no cambian gran cosa.
Mi ideología es de izquierdas, la izquierda teórica, la que lucha por la igualdad de oportunidades, pero desgraciadamente esa izquierda no ha gobernado nunca en ningún lugar del planeta. Sólo es que algunos aprovecharon para acaparar poder en nombre de esa izquierda.
No dudo que existen buenas voluntades en todos lados, pero detrás... detrás está la mano negra.