Lo relevante no es cuánto tardes en ducharte, es cuánto tiempo tienes la ducha encendida.
Un ratito para mojarte al principio y un ratito al final para aclararte tras el enjabonado y listo. Igual que con los platos.
La ducha no debería estar abierta más de un minuto.
Un ratito para mojarte al principio y un ratito al final para aclararte tras el enjabonado y listo. Igual que con los platos.
La ducha no debería estar abierta más de un minuto.