#2#3 La falta de empatía es una ventaja a la hora de progresar en muchos ámbitos, tanto laborales como en política, por poner otro ejemplo. La capacidad de hacer la zancadilla a tu prójimo o apuñalar a un compañero sin arrepentimiento ni duda es algo que hace que este tipo de gente progrese con mucha más facilidad incluso que gente con más talento, pero menos capacidad de hacer daño. Por eso cuanto más arriba llega alguien, más hay que desconfiar de esa persona.
#4 y no hay que obviar el oportunismo. Un auténtico psicópata esperará el momento adecuado y la puñalada será exquisita y sin mirar atrás. Si son conscientes del daño, intentarán no cebarse, solo cortar el cuello lo mínimo indispensable para no dejar un enemigo irreconciliable, o bien echarlo directamente para que no vuelva a estorbar. Cualquier maniobra es lícita para que sea "inevitable" su subida ante los ojos de los que cuentan, y eso es básicamente hacer caer en desgracia a los que se le ponen en el camino
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Es como dejar el capital disponible en manos de una sarta de ludópatas enajenados (* capitalismo).