Esta es la punta de lanza de uno de los más peligrosos y destacados miembros del "eje del mal". Los gringos llevan décadas haciendo creer a sus ciudadanos que están rodeados de enemigos poderosísimos para justificar el inconcebible gasto militar que mantiene en la riqueza más obscena a una élite mientras no queda dinero para servicios públicos decentes.