Aumentan las muertes cardíacas en el Reino Unido, Offit sorprendido por la miocarditis | Okay Then News [ENG]
Siguen apareciendo nuevas preocupaciones sobre las vacunas "seguras y eficaces" contra la COVID-19, sobre todo en torno al corazón. Al principio, los expertos y las autoridades, como los CDC, nos dijeron que la vacuna y sus productos permanecen en el lugar de la inyección y sólo durante unos días, lo que resultó ser una información errónea increíblemente peligrosa. Y hace sólo unos días descubrimos que acaba en la leche materna y en la sangre, lo que significa que podría ir a cualquier parte, haciendo quién sabe qué.
Un nuevo estudio publicado por el prestigioso grupo Nature (Krauson et al.) reconoce que "la distribución y duración de la persistencia del ARNm de la vacuna SARS-CoV-2 en los tejidos humanos no está clara" y que su contenido "se detectó en los ganglios linfáticos axilares en la mayoría de los pacientes que murieron en los 30 días siguientes a la vacunación". Concluyeron: "La vacuna se detectó en el miocardio [los músculos del corazón que ponen el miocardio en la miocarditis] en un subconjunto de pacientes vacunados en los 30 días siguientes al fallecimiento. Los ventrículos cardiacos en los que se detectó la vacuna presentaban lesiones miocárdicas curativas en el momento de la vacunación y tenían más macrófagos miocárdicos que los ventrículos cardiacos en los que no se detectó la vacuna. Estos resultados sugieren que las vacunas de ARNm del SARS-CoV-2 persisten de forma rutinaria hasta 30 días después de la vacunación y pueden detectarse en el corazón."
