El trasfondo de las novatadas
Déjate pisotear porque así podrás alcanzar la posición de poder que te permita pisotear a otros muchos. Hacer sufrir a quien es más débil que tú por placer es la forma perfecta de desquitarte del dolor que te causan las humillaciones de quienes son más fuertes. No oses jamás enfrentarte al fuerte: sométete a él por completo y desquítate descargando tu rabia sobre el débil. Diluirte totalmente en la manada y renunciar a tu individualidad es el único modo de no ser un fracasado. No hallarás la felicidad en ti mismo, sino en construirte una alfombra de despojos humanos que poder pisotear y con los que poder compararte para sentirte superior. Todo esto constituye el orden natural de las cosas y quien no lo acepte es un desviado antisocial.
El conjunto de reglas del párrafo anterior ¿Responde a la lógica interna de cualquier empresa multinacional, gran banco o lobby de poder, o por el contrario es el código de conducta que lleva siglos rigiendo las novatadas universitarias? Ambas respuestas son correctas y ello no es casual. Nos hacemos adultos jugando, y el contenido de nuestros juegos (incluidos los macabros) imprime nuestro carácter. Si en la adolescencia y juventud jugamos a ser gusanos con los fuertes y hienas con los débiles, en la vida adulta acabaremos siendo mezcla de hiena y gusano porque así lo habremos aprendido e interiorizado.
Siempre he estado radicalmente en contra de las novatadas. Primero porque son objetivamente denigrantes para los nuevos estudiantes, pues las "pruebas" a las que les someten están ideadas para ridiculizarles y vejarles, y las vejaciones colectivas (como el tráfico de órganos) no son permisibles en una sociedad civilizada incluso si la víctima "da su consentimiento". Segundo porque los nuevos estudiantes, en su inmensa mayoría, no están en posición de dar su consentimiento, pues la presión de grupo y el miedo al aislamiento pesan tremendamente. Y tercero porque les transmiten el mensaje de que deben tolerar que les defequen encima porque así, dentro de unos años, ellos podrán disfrutar defecando sobre los nuevos (placer de dioses), y ése es el orden social recto y justo.
Sería sumamente positivo que en el ámbito universitario se erradicasen por completo las actividades lúdicas fundamentadas en la lógica "opresor-oprimido futuro opresor" y se sustituyesen por actividades basadas en el espíritu "disfrutemos juntos sacando lo mejor de cada uno". Su impacto en el progreso social no sería ni mucho menos menor.