Semanas de 68 horas, y aguantando insultos y falsas promesas. Qué nenazas. En consultoría currabamos 100 y teníamos que llevar los grilletes y el látigo de casa.
#2 Palmadita en la espalda y un "no lo hagas más". De lo del fraude a la seguridad social y a hacienda ya se encarga el político de turno de convertirlo en "oportunidad de negocio perdido".