Llega a ser un tipo con bata blanca pidiendo mejoras en sanidad, o Isa Serra exigiendo que los bancos devuelvan lo robado, o un periodista independiente con identificación visible que quiere informar y el señor policía ese les fostia vivos antes de la segunda palabra. Pero es Ortega Smith, el fénix de los ingenios moderno, con una cámara y una etiqueta de anís del mono, y ahí tenemos al madero asintiendo y al sindicato denunciando coacciones. Y piden los ultras igualdad entre españoles.