Se comprende la ira del pueblo, pero ni el monarca, ni Sánchez, ni Mazón son asesinos. A lo sumo, meros inútiles que viven alejados de la realidad, parásitos de un estado fallido.
#2 el estado no es fallido, en mi opinión, lo que falla es la mierdipolítica, es esta guerra PP-PSOE
Hay sistema de alertas pero no lo controla una IA, lo activan los gobiernos autonomicos y lo coordina el gobierno, lo estan usando en este momento, en Almeria, en Murcia y en la misma Valencia... El problema es que no lo usaron la semana pasada cuando pudieron haberlo hecho, lo que incrementa la necesidad de labores de rescate porque las víctimas no estaban avisadas.
Aunque en Valencia hace falta mucha ayuda porque está lo gordo, la DANA no ha acabado hacen falta efectivos disponibles en toda la mitad sureste del país.
#4 Puede que la expresión no se ajuste a la realidad del todo. No es ya sólo el permanente conflicto de los partidos, siempre atentos a sus encuestras y a los intereses que representan, sino el propio estado autonómico, que para ser eficiente depende de que dos cadenas de mando sean capaces de coordinarse y ya hemos visto varias veces en 4 años lo mal que funcionan, por no hablar ahora de asuntos más pedestres, como la contratación pública. Es un dislate, un despropósito, un reino de taifas.
Ahora bien, las personas que no están en esa escala ejecutiva sí han respondido, limitados por las enormes carencias de sus jefes, desafortunadamente.
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Hay sistema de alertas pero no lo controla una IA, lo activan los gobiernos autonomicos y lo coordina el gobierno, lo estan usando en este momento, en Almeria, en Murcia y en la misma Valencia... El problema es que no lo usaron la semana pasada cuando pudieron haberlo hecho, lo que incrementa la necesidad de labores de rescate porque las víctimas no estaban avisadas.
Aunque en Valencia hace falta mucha ayuda porque está lo gordo, la DANA no ha acabado hacen falta efectivos disponibles en toda la mitad sureste del país.
Ahora bien, las personas que no están en esa escala ejecutiva sí han respondido, limitados por las enormes carencias de sus jefes, desafortunadamente.