LA DEPRESIÓN La epidemia del siglo XXI
LA DEPRESIÓN
La enfermedad que daña el cuerpo y el alma.
La depresión es una prisión en la que eres
tanto el prisionero como el cruel carcelero.
Dorthy Rowe
Querido lector:
La definición de “depresión” según la OMS es:
La depresión es una enfermedad común pero grave que interfiere con la vida diaria, con la capacidad para trabajar, dormir, estudiar, comer y disfrutar de la vida. La depresión es causada por una combinación de factores genéticos, biológicos, ambientales y psicológicos.
Síntomas de la depresión según última edición DSM 5:
•Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día
•Disminución importante del interés o el placer por todas o casi todas las actividades.
•Pérdida importante de peso sin hacer dieta o aumento de peso, disminución o aumento del apetito.
-Insomnio o hipersomnia (tendencia al sueño en situaciones anormales).
•Agitación o retraso psicomotor casi todos los días.
•Sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva o inapropiada.
-Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o para tomar decisiones. Pensamientos de muerte recurrentes, ideas suicidas recurrentes, intento de suicidio.
La depresión es una compleja y grave enfermedad que en la mayoría de los casos tiene cura, siempre que se detecte y se tomen las medidas necesarias, ya que si no, se puede complicar e incluso, en casos extremos, llegar al suicidio. Su diagnóstico puede ser utilizado vilmente, porque en muy difícil demostrar que no se tiene.
Estar desbordado por tener una mala época, no es depresión. En la actualidad, se dice con demasiada ligereza, «tengo depresión». El coste de banalizar este término es muy alto, ya que hacerlo les quita credibilidad a los verdaderos afectados por esta enfermedad, y suele provocar que escondan su sufrimiento, evitando así que pidan la ayuda necesaria.
En el presente, con toda clase de comodidades a nuestro alcance, se puede pensar que no vamos a padecer el azote de la depresión. Nada más lejos de la realidad, la OMS alerta que esta enfermedad es una de las principales causas de discapacidad en el mundo.
El diagnostico de este trastorno mental en hombres y mujeres no es indicativo, no nos muestra la realidad que se está sufriendo en el mundo. Aun siendo más mujeres las diagnosticadas de padecerla, también los hombres la sufren, sin embargo, ellos suelen ser más reacios a pedir ayuda psicológica cuando lo necesitan. En nuestra sociedad es habitual condenar el hablar de emociones y sentimientos sobre todo cuando son hombres. Y aunque las mujeres suelen presentar más conductas suicidas, son los hombres los que más se suicidan, así lo confirma la OMS en el siguiente artículo:
Se suicidan más del doble de hombres que de mujeres. www.who.int/es/news/item/17-06-2021-one-in-100-deaths-is-by-suicide
Considero que banalizar esta enfermedad es una crueldad y una falta de respeto hacia aquellas personas que de verdad sufren este trastorno mental. Porque a ellas, la vida les viene grande, les duele el alma y la sienten muerta. ¡Eso si es depresión!
Seamos humanos, escuchemos a quienes nos rodean y están viviendo esta terrible oscuridad. Démosles un poquito de aliento, compresión y apoyo. Y recordémosles con cariño, que como decía nuestro querido Charles Chaplin:
Nuestro cerebro es el mejor juguete que se ha creado. En él están todos los secretos, incluso el de la felicidad.
