#15 A mi me parece que el del artículo sólo pretende llamar la atención sobre un asunto del que quizá algunos no seamos conscientes, es el mal empleo del tiempo del que dispongamos. No lo veo como una crítica política, la verdad. Realmente, ningún político tiene una varita mágica para que la gente emplee su tiempo lo mejor posible.
#16 Más bien parece un halago a Madrid oculto en una crítica. Parece evidente que, cuando se produce una cola, es porque hay muchas personas queriendo acceder a ese servicio u ocio al mismo. Muy por encima de las expectativas de ese negocio o esa ciudad en este caso.
Si nos vamos a la raíz filosófica que señalas, es decir, plantearnos en que utilizamos nuestro tiempo, la pregunta es mucho más profunda y me aparece alejada de las colas o Madrid. Si la sugerencia es que hacer cola no es invertir "bien" nuestro tiempo, entramos en la discusion interminable de en qué invertir el tiempo sería aprovecharlo y en qué no. Algo totalmente personal y que sinceramente creo que tiene infinitas respuestas válidas.
#17 Claro que tiene muchas respuestas válidas, además pasa también que lo que a alguien le pueda parecer emplear mal el tiempo, a otra persona le puede parecer que no. Vamos, que sólo es por reflexionar nada más, yo pienso que no está de más plantearlo.
#10#15#17 este es un debate muy antiguo, yo estoy con Lucrecio al mirar las fotos de la gente apelotonada en los comercios navideños, cuando dice al respecto: “Dulce es ver el gran mar alborotado por la tempestad, y contemplar desde la tierra el enorme esfuerzo del otro; no porque ver su sufrimiento proporcione placer, sino porque es dulce saber de qué males te has librado. Dulce es asimismo contemplar grandes batallas de encrespada guerra en la llanura sin formar parte del peligro, pero nada hay más placentero que estar solo en los altos espacios serenos, bien fortificados por la doctrina de los sabios, desde donde puedes guardarte de la soberbia de los demás y verlos errar aquí y allá y rondar perdidos el camino de la vida, careciendo de ingenio, rivalizando en nobleza de sangre y esforzándose noche y día con actividad incesante para recabar una riqueza grande y asumir el poder. ¡Oh mentes miserables de los hombres, oh pechos ciegos! En qué tinieblas de vida y tras cuántos grandes peligros transcurre esta vida, cualquiera que sea”. (De rerum natura, libro II)
#16 La gente sabe de sobra que el centro, en estos días, va a estar hasta arriba de gente y sabe a lo que se expone. Si alguien quiere gastar su tiempo en hacer colas y en casi ni poder andar por la cantidad de gente que hay es su elección y nadie debería decirle que lo que hace está mal y que se dedique a hacer otra cosa. A mí me gusta el centro lleno de gente y me gusta ver las luces y, sin embargo, a mi pareja no, lo odia y no se me ocurriría llamarla estúpida por no querer ir al centro. Por qué yo voy a tener razón? Por qué el articulista va a tener razón? Aquí nadie tiene la verdad absoluta. Para gustos los colores.
#22 Pues sí, no digo lo contrario, y no veo mal reflexionar sobre la forma de emplear nuestro tiempo que es lo que intento decir en mi comentario #16, totalmente de acuerdo en que también depende del gusto de cada uno. De todas formas pienso que este artículo se ha tomado como una crítica política, y yo no lo veo así, que también lo dije en otro comentario.
En definitiva, que no suelo tomarme a mal cuando alguien me dice que estoy empleando mal mi tiempo, ni le tomo por imbécil. Mis padres me preguntaban algunas veces que qué coño hacía.
0k 20
Hemos deshabilitado la autenticación con Facebook. Si entras a Mediatize con una cuenta de Facebook, lee esto.
Si nos vamos a la raíz filosófica que señalas, es decir, plantearnos en que utilizamos nuestro tiempo, la pregunta es mucho más profunda y me aparece alejada de las colas o Madrid. Si la sugerencia es que hacer cola no es invertir "bien" nuestro tiempo, entramos en la discusion interminable de en qué invertir el tiempo sería aprovecharlo y en qué no. Algo totalmente personal y que sinceramente creo que tiene infinitas respuestas válidas.
*
*
En definitiva, que no suelo tomarme a mal cuando alguien me dice que estoy empleando mal mi tiempo, ni le tomo por imbécil. Mis padres me preguntaban algunas veces que qué coño hacía.