Se estima que 500.000 manifestantes salieron a las calles de Tel Aviv y 250.000 se manifestaron en el resto de Israel (ENG)

Es la protesta más grande en la historia de Israel en un solo lugar. Estas manifestaciones se producen durante una semana de protestas consecutivas, tras el anuncio del ejército israelí de que había recuperado los cuerpos de seis cautivos en Gaza, una medida que ha enfurecido al público israelí. Salhut destaca que las familias de los cautivos están culpando al Primer Ministro Netanyahu, acusándolo de tener sangre en sus manos y de ser el principal obstáculo para un acuerdo de alto el fuego e intercambio de rehenes.