#2 Me pregunto qué propondrían los candidatos en unas elecciones judiciales que no pudiesen entender los ciudadanos. Por otra parte, ya se puede llegar a legislador siendo un perfecto inútil, no digamos a ministrea, a presidente o líder de la oposición.
Quizás los ciudadanos sí puedan elegir a los jueces de proximidad y que su mandato pueda caducar. De ningún modo puede ser un poder del estado si el cargo es vitalicio.
#6 Eso que propones es el juez de paz, ya existe y tiende a desaparecer porque no sirve para nada.
Los jueces tienen que saber Derecho, no caerle simpáticos a la población.
Sería buena idea una oposición básica para poder ser elegido para cualquiera de los puestos que mencionas. Mira, o apruebas este examen, o no puedes ser ni concejal de festejos, a estudiar. No sería la panacea, pero nos libraríamos de muchos zoquetes.
#7 Ya digo que no tengo yo la solución. Si la tuviese, me presentaría al legislativo ().
Ningún poder del Estado debería estar en manos de empleados públicos vitalicios.
La democracia tiene defectos. El principal, que presupone que todos los votantes son capaces de discernir quién les representa mejor. Pero aprovechando que en España no hay democracia, tampoco sería gran problema que sólo pudieran ser candidatos quienes aportasen un bagaje muy por encima del mínimo, bien con estudios, bien con experiencia laboral, bien ambas cosas.
No veo el problema de que los jueces sean empleados públicos, ni en que elijan su propio órgano de gobierno. Aún así, que la plebe pueda votar al CGPJ (entre jueces, no entre gañanes diputeros) seguiría siendo preferible a lo que tenemos, y sobre todo a lo que pretende el enajenado Calígula.
#9 Al menos yo no he planteado que sea un problema que los jueces y magistrados sean empleados públicos. El problema es, para mi, que sean un poder del estado a título vitalicio.
#11 Veo que sigues apuntando para otro lado. ¿Debe ser vitalicio el ejercicio de uno de los tres poderes del Estado? El ejecutivo y el legislativo se tienen que renovar regularmente, aunque luego haya unos cuantos que se pasan su vida grapados al escaño gracias al poder de los partidos. Pero se tienen que someter al voto, pueden perder el acta. Y desde luego, es inaceptable que el legislativo elija al ejecutivo. Más aún, que el ejecutivo esté formado casi siempre por miembros del legislativo. En España, como digo, no hay democracia.
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Quizás los ciudadanos sí puedan elegir a los jueces de proximidad y que su mandato pueda caducar. De ningún modo puede ser un poder del estado si el cargo es vitalicio.
Los jueces tienen que saber Derecho, no caerle simpáticos a la población.
Sería buena idea una oposición básica para poder ser elegido para cualquiera de los puestos que mencionas. Mira, o apruebas este examen, o no puedes ser ni concejal de festejos, a estudiar. No sería la panacea, pero nos libraríamos de muchos zoquetes.
Ningún poder del Estado debería estar en manos de empleados públicos vitalicios.
La democracia tiene defectos. El principal, que presupone que todos los votantes son capaces de discernir quién les representa mejor. Pero aprovechando que en España no hay democracia, tampoco sería gran problema que sólo pudieran ser candidatos quienes aportasen un bagaje muy por encima del mínimo, bien con estudios, bien con experiencia laboral, bien ambas cosas.
No veo el problema de que los jueces sean empleados públicos, ni en que elijan su propio órgano de gobierno. Aún así, que la plebe pueda votar al CGPJ (entre jueces, no entre gañanes diputeros) seguiría siendo preferible a lo que tenemos, y sobre todo a lo que pretende el enajenado Calígula.