La DGT vuelve a las andadas y esconde un radar en un lugar imposible de descubrir
La incorporación de mini radares ha permitido que los agentes los coloquen en lugares muy poco visibles a la caza de los infractores. Pese a que en algunas instrucciones del Cuerpo se habla de no colocar los radares justo al inicio de travesías o en tramos en los que los límites de velocidad son anormalmente bajos, en estas imágenes que corren por internet puede verse cómo los agentes en ocasiones optan por ocultar los equipos en señales de la carretera o detrás de los guardarraíles.