Un juego sexual termina en una persecución policial tras un aviso de secuestro
Una vecina del municipio mallorquín de Marrachí dio la voz de alarma tras observar como un hombre introducía atada y amordazada a una mujer en el maletero. Al poco tiempo, la policía interceptó al vehículo y se inspeccionó de arriba a abajo. Fue entonces cuando abrieron el maletero y encontraron a la mujer de unos 40 años en ropa interior, atada de pies y manos con una cuerda de esparto. La mujer manifestó que se trataba de un simple juego sexual, que le gustaba que le ataran y la metieran en el maletero del coche, según informa.