A esta chica le pasará lo que el partido quiera que le pase. Sus votantes ya hemos visto que tienen tragaderas para todo. Con las decenas de casos de corrupción que se han dado en el PP, siguen votándolos convencidos. Así que los votantes no son un problema.
Si los mandamases del partido prefieren a Casado, y ella aspira a su puesto, le buscarán las cosquillas para echarla, porque al fin y al cabo, entre ellos todo se sabe.