El avión supersónico, la apuesta de la aviación americana
El 24 de octubre de 2003 voló por última vez el Concorde tras casi tres décadas de servicio. El accidente que sufrió una de las aeronaves el 25 de julio del año 2000 y la escasa rentabilidad de la marca provocaron que el icónico avión supersónico de British Airways y Air France se quedase sin alas. Más de una década después, tres compañías estadounidenses están trabajando para ver de nuevo en el cielo otro avión supersónico.