Una tristeza infinita inunda un planeta dominado por una especie incapaz de aprender de sus errores.
La esperanza es lo último que se pierde, dicen. Lo que no sé es si cabe tener esperanza.
Y no, no van a acabar con el sufrimiento de millones, y millones, de personas, tirando las bombas nucleares. Su sadismo, ya saben de quiénes, no tiene límites.
La esperanza es lo último que se pierde, dicen. Lo que no sé es si cabe tener esperanza.
Y no, no van a acabar con el sufrimiento de millones, y millones, de personas, tirando las bombas nucleares. Su sadismo, ya saben de quiénes, no tiene límites.
Te doy permiso para poner esto en |terrorcitas, @helisan