El discurso del mérito es el absolutismo ilustrado de la aristocracia. Cuando se habla de mérito al final siempre he encontrado a quienes se creen superiores y buscan maneras de justificarlo.
Incluso Platón, que proponía la dictadura de los filósofos como el mejor sistema de gobierno.
Lo realmente jodido es darnos cuenta que el mérito es de la cultura, los usos y costumbres, y no de los individuos. Obviamente, un individuo no puede cambiar a la sociedad, eso es ¿prepotencia aristocrática?
¿Donde está el mérito en quienes creen que les hace diferente o mejores?
La "sociedad mercantilista" me permite como individuo vivir la realidad de espaldas a la mayoría, por ejemplo, los gays o los testigos de Jehova.
Es más, te permite vivir en tu Matrix, si quieres. Hay muchos mundos, muchas formas de vivir tu vida.
¿Acaso Rand no creía que podía cambiar a la sociedad? John Galt protagoniza una "fuga de cerebros" que pretendía paralizar el mundo al desaparecer quienes realmente tienen "mérito".
En un mundo banalizado, donde con dos clicks tienes lo que quieres, tener talento es un problema. John Galt ha de irse a por tabaco porque todo está paquetizado y manufacturado, y lo único que importa es la cuenta de resultados. Es un mal endémico de esta sociedad y de su hedonismo, ¿quién quiere a alguien crítico y que tenga ideas propias? No se incentiva, John Galt ha de estar frustrado y amargado. Igual que Rand.
En el mundo real, ninguno tiene un mérito superior al que logramos como sociedad. Ningún médico cura mejor que un hospital.
La solución que da Rand es la que, precisamente, nos lleva a esto. Es un argumento circular, toma el dinero y corre, que cada palo aguante su vela. Bien comun? Ja.