Nos pueden pasar mil desgracias cotidianas o banales como que se acabe repentinamente una relación, que te quejes del trabajo, que suspendas un examen, que discutas con un amigo por una gilipollez, etc...pero al final lo único que nos debe importar en esta vida es precisamente estar y sentirnos VIVOS, por que nunca sabes cuando todo se va a acabar.

Vivid la vida, apreciarla y quererla como si fuese el último aliento. La vida puede ser muy hija de puta muchísimas veces, por eso tenemos que aprender a vivir y VALORAR todo aquello que nos hace sentir vivos, aquellas personas que nos hacen sentir todavía más vivos y que ante cualquier tempestad nos acompañan en la travesía, por que al final solo por esa gente que nos acompaña, la vida es mucho más fácil de apreciarla y quererla aunque sea siempre injusta.

La vida se nos puede esfumar en cualquier momento y de mil maneras, por eso más vale morir estando vivo que morir habiendo muerto tiempo atrás en vida.

La vida, esa gran concepción contradictoria...