#2 El sistema yanqui para el tribunal supremo es el más potable que conozco. Cargos vitalicios y cuando mueren, el presidente de turno es quien nomina. Trump ha tenido suerte y colocado dos ¡TRES! conservadores, cambiando la orientación del supremo.
Y tengo entendido que en EEUU la imparcialidad de los jueces del Supremo es el mayor orgullo y fuente de dignidad que tienen los elegidos.
ES decir; por mucho que les haya elegido Trump, o Bush, u Obama, han llegado a lo más alto de su carrera, son gente ya mayor, y su única ambición es ser recordado como honesto e imparcial, y no como un juez "dócil".
#4 Como el Juez Castro, un grande que será recordado por no doblegarse.
También tenemos al gran Calatayud, que ya me gustaría a mi que un hombre con esa claridad de mente esté en el supremo o constitucional.
Incluso Carmena, que tiene un programa en la SER dirigido a estudiantes de derecho y muestra no solo como funciona la justica, si no su proceso de toma de decisiones.
Mencionaría a Garzon, que aunque tenga detractores, por lo menos sabía redactar ordenes internacionales de extradición.
También tenemos jueces que quieren ser recordados como humanistas y no como concubinas.
0k 20
Hemos deshabilitado la autenticación con Facebook. Si entras a Mediatize con una cuenta de Facebook, lee esto.
*
dos¡TRES! conservadores, cambiando la orientación del supremo.Y tengo entendido que en EEUU la imparcialidad de los jueces del Supremo es el mayor orgullo y fuente de dignidad que tienen los elegidos.
ES decir; por mucho que les haya elegido Trump, o Bush, u Obama, han llegado a lo más alto de su carrera, son gente ya mayor, y su única ambición es ser recordado como honesto e imparcial, y no como un juez "dócil".
*
También tenemos al gran Calatayud, que ya me gustaría a mi que un hombre con esa claridad de mente esté en el supremo o constitucional.
Incluso Carmena, que tiene un programa en la SER dirigido a estudiantes de derecho y muestra no solo como funciona la justica, si no su proceso de toma de decisiones.
Mencionaría a Garzon, que aunque tenga detractores, por lo menos sabía redactar ordenes internacionales de extradición.
También tenemos jueces que quieren ser recordados como humanistas y no como concubinas.