#1 La banca fue en gran parte responsable, pero había mas actores y no podemos olvidar repartir responsabilidad a cada uno de ellos. La banca por dar hipotecas sin ningún control ni análisis de riesgo a todo el mundo, el gobierno por no poner coto por ley a esas hipotecas para pinchar la burbuja y aprovecharse de ella para generar un falso crecimiento que acabó cargándose la economía del país para mucho tiempo, y por supuesto, nosotros mismos, los ciudadanos, que nos creímos lo de "los pisos nunca bajan" y pedíamos hipotecas sin pensarlo ni analizarlo con cuidado, y los que vendían cada vez pidiendo más porque veían que si el vecino había vendido por X ellos tenían que venderlo por más de X al día siguiente. Me gustaría poder decir que hemos aprendido de aquella época aún tan reciente, pero lo que veo últimamente me hace pensar que no hemos aprendido nada.
#8 Totalmente de acuerdo, amigo. Pero la banca tenía en su mano el control más importante, que es eso de que hablas cuando dices que concedían hipotecas sin análisis de riesgos.
#9 Si, a la hora de repartir quién tiene más responsabilidad sin duda la banca se lleva la parte del león, luego el Estado y los últimos serían la ciudadanía, pero siempre es bueno recordar que nosotros como ciudadanos teníamos también la posibilidad de parar esto, porque esas tres partes eran todas necesarias para generar esa locura, y nos dejamos engañar, en parte por ignorancia, en parte por codicia.
#10 No sé qué decirte @krzysiu, se ha llevado a cabo una socialización de perdidas que ha endeudado a todo quisqui... tuviera o no niveles de morosidad.
Cuando la banca tiene exceso de liquidez, suelta el hilo y se afana en esparcir dinero sin ningún respaldo material. Y cuando tiene escasez, embargan bienes más que reales y tangibles. Apesta demasiado como para que no sospechar que haya cierto grado de intencionalidad en esto.
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Cuando la banca tiene exceso de liquidez, suelta el hilo y se afana en esparcir dinero sin ningún respaldo material. Y cuando tiene escasez, embargan bienes más que reales y tangibles. Apesta demasiado como para que no sospechar que haya cierto grado de intencionalidad en esto.