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"En las redes sociales, se desató un furor totalmente diferente, ya que los grupos de extrema derecha se movilizaron contra los residentes musulmanes del barrio, en particular el concejal del partido Harehills Green, Mothin Ali, quien, si se puede creer en las redes sociales, fue cómplice de los disturbios.

El antagonista de extrema derecha Tommy Robinson afirmó que las imágenes mostraban "al concejal recién elegido para la zona provocando disturbios esta noche en Leeds. Hay múltiples informes de que incluso está en las calles con ellos".

De hecho, decenas de personas vieron a Ali intervenir esa misma noche, en un intento de calmar el desorden y detener los ataques a la policía.

A las 11 de la noche, estaba en el incendio del autobús, con una capa de sudor en la frente, pidiendo a la comunidad que se uniera. Estaba flanqueado por otros residentes, hombres musulmanes y una mezcla de personas de diferentes orígenes que se enfrentaron ansiosamente a quienes intentaban amplificar el caos.

Isa Ali, un joven que vive en Harehills y que vio cómo se desarrollaban los acontecimientos desde el principio, dijo que la gente en Internet había estado “difamando esto como una situación musulmana, y no lo es”.

Un trabajador juvenil de mayor edad, que había formado parte de este grupo conciliador, dijo: “Varios jóvenes BAME han hecho cadenas para impedir que la gente tire cosas al fuego”.

Mothin Ali tomó una caja de madera de un hombre que había intentado tirarla al incendio del autobús y le dijo: “Este es nuestro barrio”. El trabajador juvenil añadió: “Piensa antes de actuar”.

El barrio de Harehills y Gipton está en el 3% más desfavorecido del país (la imagen icónica del cartel del banco de alimentos pintado en negro sobre un edificio de ladrillo rojo fue tomada aquí) y dos tercios de las viviendas son propiedad de propietarios privados o asociaciones de vivienda. El impacto brutal de la austeridad ha golpeado especialmente duro aquí: mucha gente tiene muy poco que perder y muchos dijeron que sentían que la comunidad había sido descuidada y se le había mostrado poco respeto durante años.

Ali dijo al Guardian: “Son comunidades como esta las que han sido defraudadas, y estas cosas están latentes bajo la superficie y cuando nos descuidan, esto es lo que termina sucediendo”.

Algunos residentes expresaron su frustración por la aparente ausencia de políticos laboristas, lo que refleja un sentimiento más amplio de agravio hacia el partido por cuestiones como Gaza. Aunque Salma Arif, concejala laborista, había estado en el lugar de los hechos más temprano ese día, fue solo Ali quien permaneció hasta que se apagaron los incendios. “¿Dónde está el Partido Laborista?”, preguntó un hombre varias veces.

El diputado de East Leeds, Richard Burgon, publicó en X que se dirigía a casa desde el parlamento, mientras que la alcaldesa de West Yorkshire, Tracy Brabin, dijo que estaba “horrorizada” por las escenas. Keir Starmer, el primer ministro, dijo que la policía de West Yorkshire tendría el “pleno apoyo” del gobierno para investigar los hechos.

En una actualización en las primeras horas de la mañana del viernes, la policía dijo que el desorden fue “instigado por una minoría criminal con la intención de perturbar las relaciones comunitarias”. La fuerza dijo más tarde que había realizado varias detenciones.

El jueves por la noche, muchos vecinos expresaron su malestar y frustración por el hecho de que la policía pareciera haberlos abandonado por completo durante varias horas. Un hombre dijo: “A la policía no le importa nuestra zona. Se han ido, nos dejarán ocuparnos de ello”.

Sin embargo, la decisión de la policía de West Yorkshire de vigilar la escena desde calles de distancia y desde un helicóptero que pasó horas sobre Harehills pareció evitar que la situación se agravara.

Alrededor de la medianoche, los vecinos empezaron a recoger agua de las casas cercanas en cubos y contenedores Biffa para reducir el incendio del autobús a brasas humeantes. La multitud se movió brevemente unos 50 metros por la calle y se oyeron vítores cuando un joven, Mohammed, hizo volteretas hacia atrás para entretener a los reunidos y desactivar el calor restante. La gente puso música en sus teléfonos.

Cuando las llamas se apagaron, Ali le dijo al Guardian: “Harehills es como un arcoíris de sabores. Tienes todos los colores, todos los credos, todos estamos en un crisol. Y seguimos con esto.

“No somos las personas más ricas del planeta. Somos pobres. Pero estamos todos juntos en esto. Están trayendo agua en contenedores con ruedas para apagar el fuego de un autobús en llamas. Eso es espíritu comunitario, eso es Harehills”."
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