Jürgen Elsässer es el redactor jefe desde la fundación de la empresa. La revista se publica mensualmente en una edición impresa. La tirada debería ser de 40.000 ejemplares. También hay un sitio web, un canal de videos con transmisiones entre semana y presencia en las redes sociales. Compact TV tiene 345.000 suscriptores en YouTube.
Compact es parte de la "Nueva Derecha Alemana". Este término describe una escena que representa ideas de un Estado étnicamente homogéneo con rasgos autoritarios. Al mismo tiempo, se distancia tácitamente de los ultraderechistas que citan al nacionalsocialismo histórico.
Una declaración del editor jefe Elsässer da una idea rápida dónde, en el espectro político y constitucional, se encuentra la revista. En enero de 2018 dijo que Pegida, el Movimiento Identitario, la AfD, el “Uno por ciento” y Compact eran como cinco dedos que podían formar un puño. Desde 2021, la Oficina para la Protección de la Constitución ha clasificado a la revista como “ciertamente de extrema derecha”. En febrero, muchas librerías de estaciones lo agotaron.
Reaccionarios contra la sociedad pluralista
Compact destaca por el diseño, el cual se basa en un conjunto llamativo e inmediatamente provocativo en la selección de imágenes y temas, así como en la exageración, por ejemplo, en los títulos. Temas como la guerra en Ucrania, la migración o las medidas gubernamentales durante la pandemia del coronavirus son retomados una y otra vez manipulados y politizados hacia la posiciones radicales de ultraderecha.
Son “un medio muy oportunista”, analiza el sociólogo Felix Schilk. En el proyecto REDACT de Tubinga investiga opciones de acción contra las narrativas conspirativas y la desinformación en Europa. Según Schilk, Compact salta repetidamente a los debates e intenta intensificarlos e instrumentalizarlos.
El Ministerio del Interior explica lo que esto significa en una declaración sobre la prohibición: Compact-Magazin GmbH "difunde contenidos antisemitas, racistas, antiminorías, revisionistas históricos y teorías de la conspiración en sus publicaciones y productos de amplio alcance". También hace campaña “contra un sistema social pluralista”.
¿Quién es el redactor jefe de Compact, Jürgen Elsässer?
Jürgen Elsässer es en realidad profesor, pero desde hace varias décadas trabaja como periodista. En este trabajo, este hombre de 67 años ya ha cometido algunos errores políticamente hablando. Al principio frecuentaba publicaciones de izquierda para las que solía escribir alún artículo, pero a más tardar desde 2009 se polarizó hacia la derecha y ahora pertenece al espectro de la extrema derecha.
Elsässer fundó Compact en 2010 y desde entonces es el editor jefe de la revista. El 16 de julio, su apartamento fue registrado como parte de la prohibición de la revista.
El objetivo de Elsässer, según él mismo, es reunir a varios actores y grupos de derecha. Esto no sólo debería incluir al partido “Alternativa para Alemania” (AfD), sino también ir más allá, como ocurre con los movimientos Pegida o los “Identitarios” (IB) y el Instituto de Política de Estado. También se mantienen contactos en el extranjero, por ejemplo con el ultraderechista austriaco Martin Sellner.
Elsässer es cercano a los representantes de derecha del AfD y es un invitado bienvenido en las conferencias de su partido. Con la campaña “Ola Azul”, promueve la participación del AfD en el gobierno después de las elecciones federales de 2025. Mientras que los políticos de los partidos burgueses son a veces duramente criticados por el Compact, Elsässer busca la proximidad con políticos del AfD como Björn Höcke.
¿Cuál es la base legal de la prohibición de Compact Magazin?
Para prohibir Compact-Magazin GmbH, el Ministerio Federal del Interior se refiere a la prohibición de asociaciones contra la constitución. Según un comunicado publicado el 16 de julio, esto también podría aplicarse a las empresas "bajo determinadas condiciones". Continúa diciendo: "Las organizaciones van contra el orden constitucional en el sentido del artículo 9 de la Ley Fundamental y del artículo 3 de la Ley de asociaciones".
El Ministerio Federal del Interior también enumera otros puntos a favor de la prohibición. Compact propaga “un concepto social étnico-nacionalista que, en sus propias palabras, quiere excluir a los ‘extraños étnicos’ del pueblo del estado”. Esto ignora la dignidad humana de aquellos ciudadanos migrantes o alemanes “que no encajan en este concepto étnico”.
También se menciona que Compact utiliza “una resistencia y una retórica revolucionaria” y propaga agresivamente el derrocamiento del orden político; Se utilizan constantementes y “representaciones distorsionantes y manipuladoras y difamatorias”. Los lectores y usuarios de Compact son frecuentemente “incitados y alentados a actuar contra el orden constitucional”.
Con la prohibición, Compact ya no puede publicar. Esto se aplica a las ediciones impresas y en línea y a los canales de redes sociales. Probablemente también será necesario eliminar todo el contenido anterior de los distintos canales. Está prohibido vender la revista. También están prohibidos los símbolos asociados con Compact. Esto también incluye la “Ola Azul”, el logotipo de una campaña de Compact para la participación del gobierno de AfD.
¿Puede Compact tomar medidas contra la prohibición?
Compact puede demandar contra la prohibición del Ministerio Federal del Interior. Se puede suponer que Jürgen Elsässer y sus colegas harán lo mismo. Si se emprenden acciones legales, los argumentos del Ministerio Federal del Interior, encabezado por Nancy Faeser (SPD), se sopesarán ante los tribunales.
El meollo de una posible demanda probablemente sea la cuestión de si la prohibición se puede aplicar a una publicación o a un medio de comunicación utilizando la ley de asociaciones. Los jueces también tendrían que aclarar si Compact fue prohibida por la ideología que difundía o por el papel de la revista como ala de extrema derecha.
Los registros decretados del 16 de julio en la sede de la revista también podrían ser importantes en el contexto de una posible demanda. Los registraros se dieron en las propiedades de las organizaciones de Compact y los apartamentos de actores destacados como el editor jefe Jürgen Elsässer y accionistas clave, en ellos se confiscar activos y otras pruebas.
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Compact es parte de la "Nueva Derecha Alemana". Este término describe una escena que representa ideas de un Estado étnicamente homogéneo con rasgos autoritarios. Al mismo tiempo, se distancia tácitamente de los ultraderechistas que citan al nacionalsocialismo histórico.
Una declaración del editor jefe Elsässer da una idea rápida dónde, en el espectro político y constitucional, se encuentra la revista. En enero de 2018 dijo que Pegida, el Movimiento Identitario, la AfD, el “Uno por ciento” y Compact eran como cinco dedos que podían formar un puño. Desde 2021, la Oficina para la Protección de la Constitución ha clasificado a la revista como “ciertamente de extrema derecha”. En febrero, muchas librerías de estaciones lo agotaron.
Reaccionarios contra la sociedad pluralista
Compact destaca por el diseño, el cual se basa en un conjunto llamativo e inmediatamente provocativo en la selección de imágenes y temas, así como en la exageración, por ejemplo, en los títulos. Temas como la guerra en Ucrania, la migración o las medidas gubernamentales durante la pandemia del coronavirus son retomados una y otra vez manipulados y politizados hacia la posiciones radicales de ultraderecha.
Son “un medio muy oportunista”, analiza el sociólogo Felix Schilk. En el proyecto REDACT de Tubinga investiga opciones de acción contra las narrativas conspirativas y la desinformación en Europa. Según Schilk, Compact salta repetidamente a los debates e intenta intensificarlos e instrumentalizarlos.
El Ministerio del Interior explica lo que esto significa en una declaración sobre la prohibición: Compact-Magazin GmbH "difunde contenidos antisemitas, racistas, antiminorías, revisionistas históricos y teorías de la conspiración en sus publicaciones y productos de amplio alcance". También hace campaña “contra un sistema social pluralista”.
¿Quién es el redactor jefe de Compact, Jürgen Elsässer?
Jürgen Elsässer es en realidad profesor, pero desde hace varias décadas trabaja como periodista. En este trabajo, este hombre de 67 años ya ha cometido algunos errores políticamente hablando. Al principio frecuentaba publicaciones de izquierda para las que solía escribir alún artículo, pero a más tardar desde 2009 se polarizó hacia la derecha y ahora pertenece al espectro de la extrema derecha.
Elsässer fundó Compact en 2010 y desde entonces es el editor jefe de la revista. El 16 de julio, su apartamento fue registrado como parte de la prohibición de la revista.
El objetivo de Elsässer, según él mismo, es reunir a varios actores y grupos de derecha. Esto no sólo debería incluir al partido “Alternativa para Alemania” (AfD), sino también ir más allá, como ocurre con los movimientos Pegida o los “Identitarios” (IB) y el Instituto de Política de Estado. También se mantienen contactos en el extranjero, por ejemplo con el ultraderechista austriaco Martin Sellner.
Elsässer es cercano a los representantes de derecha del AfD y es un invitado bienvenido en las conferencias de su partido. Con la campaña “Ola Azul”, promueve la participación del AfD en el gobierno después de las elecciones federales de 2025. Mientras que los políticos de los partidos burgueses son a veces duramente criticados por el Compact, Elsässer busca la proximidad con políticos del AfD como Björn Höcke.
¿Cuál es la base legal de la prohibición de Compact Magazin?
Para prohibir Compact-Magazin GmbH, el Ministerio Federal del Interior se refiere a la prohibición de asociaciones contra la constitución. Según un comunicado publicado el 16 de julio, esto también podría aplicarse a las empresas "bajo determinadas condiciones". Continúa diciendo: "Las organizaciones van contra el orden constitucional en el sentido del artículo 9 de la Ley Fundamental y del artículo 3 de la Ley de asociaciones".
El Ministerio Federal del Interior también enumera otros puntos a favor de la prohibición. Compact propaga “un concepto social étnico-nacionalista que, en sus propias palabras, quiere excluir a los ‘extraños étnicos’ del pueblo del estado”. Esto ignora la dignidad humana de aquellos ciudadanos migrantes o alemanes “que no encajan en este concepto étnico”.
También se menciona que Compact utiliza “una resistencia y una retórica revolucionaria” y propaga agresivamente el derrocamiento del orden político; Se utilizan constantementes y “representaciones distorsionantes y manipuladoras y difamatorias”. Los lectores y usuarios de Compact son frecuentemente “incitados y alentados a actuar contra el orden constitucional”.
Con la prohibición, Compact ya no puede publicar. Esto se aplica a las ediciones impresas y en línea y a los canales de redes sociales. Probablemente también será necesario eliminar todo el contenido anterior de los distintos canales. Está prohibido vender la revista. También están prohibidos los símbolos asociados con Compact. Esto también incluye la “Ola Azul”, el logotipo de una campaña de Compact para la participación del gobierno de AfD.
¿Puede Compact tomar medidas contra la prohibición?
Compact puede demandar contra la prohibición del Ministerio Federal del Interior. Se puede suponer que Jürgen Elsässer y sus colegas harán lo mismo. Si se emprenden acciones legales, los argumentos del Ministerio Federal del Interior, encabezado por Nancy Faeser (SPD), se sopesarán ante los tribunales.
El meollo de una posible demanda probablemente sea la cuestión de si la prohibición se puede aplicar a una publicación o a un medio de comunicación utilizando la ley de asociaciones. Los jueces también tendrían que aclarar si Compact fue prohibida por la ideología que difundía o por el papel de la revista como ala de extrema derecha.
Los registros decretados del 16 de julio en la sede de la revista también podrían ser importantes en el contexto de una posible demanda. Los registraros se dieron en las propiedades de las organizaciones de Compact y los apartamentos de actores destacados como el editor jefe Jürgen Elsässer y accionistas clave, en ellos se confiscar activos y otras pruebas.