Los jugadores de la selección española se marcharon de la Moncloa sin despedirse de Pedro Sánchez. Los líderes del equipo, en una reunión previa al partido, mostraron su disconformidad a que el presidente del Gobierno apareciera por el vestuario en la que fue la primera visita del político en el torneo. «Que ni se le ocurra bajar al vestuario», dijeron tajantes a los emisarios de la Federación. Los futbolistas no querían ir a Moncloa , pero la visita era un compromiso de la Federación Española de Fútbol y de su presidente, Pedro Rocha, que no quiere más problemas de los ya existentes con el Gobierno de España. Desde el vestuario de la selección recuerdan los continuos desprecios de Pedro Sánchez a este equipo que tanta felicidad ha dado a los españoles. Ahora este Gobierno se suma a la ola de esa alegría, pero durante mucho tiempo despreció a este equipo y a estos jugadores.