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Trump estaba en el centro de una trama para comprar el silencio de una estrella porno en los días previos a las elecciones de 2016.

Cuando las revelaciones de Stormy Daniels sobre una aventura sexual con Trump amenazaron con revertir su campaña presidencial, ordenó a su abogado que le pagara $130,000 (102,000 libras) para mantenerla callada.

El pago enterró la historia, y Trump fue elegido más tarde como el 45o presidente de los Estados Unidos.

El portavoz de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos dijo: "Hoy es un día vergonzoso en la historia estadounidense".

El juicio en la Corte Penal de Manhattan escuchó cómo el trasfondo del crimen fue un escándalo en la campaña de Trump un mes antes de las elecciones de 2016.
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Se hizo pública una cinta de video del programa de televisión Access Hollywood, en la que Trump fue sorprendido en un micrófono hablando en términos obscenos sobre tocar a las mujeres ("Cuando eres una estrella te dejan hacerlo, agárralas por el p***y. Puedes hacer cualquier cosa")

La audiencia escuchó cómo se veía como una "crisis" dentro del Equipo Trump y que la campaña pronto se enfrentaría a otra.

Daniels, una actriz de cine para adultos, afirmó que tuvo un encuentro sexual con Trump en Lake Tahoe, Nevada, en 2006.

Avanzó 10 años y, mientras él se postulaba para el cargo, ella estaba vendiendo su historia.

Los detalles, como se escuchó en este juicio, eran que ella había conocido a Trump en un torneo de golf, y él la había invitado a cenar.

Llegó a la suite del hotel y lo encontró vestido con pijamas de satén, hasta que le pidió que se cambiara.

En un momento dado, él produjo una revista, y ella le dijo a la corte que le había dado una paliza "justo en el culo".

Más tarde, ella salió del baño y lo encontró acostado en la cama con una camiseta y calzoncillos, y terminaron teniendo sexo.

Trump niega que el enlace haya tenido lugar.

"Atrapa y mata"

Su plan para vender su historia fue comunicado a Trump por David Pecker, ex editor de la revista National Enquirer.

Era amigo de Trump y operó un plan de "atrapar y matar" en su nombre, para capturar historias negativas y matarlas antes de que pudieran publicarse.

Ya había pagado $150,000 (£117,000) para silenciar a Karen McDougal, una modelo de Playboy con una historia de una aventura de 10 meses con Trump.

Trump también niega que el asunto haya tenido lugar.

El Sr. Pecker dijo a la corte que había asistido a una reunión en la Torre Trump, Nueva York, en agosto de 2015 con Trump y Michael Cohen, el abogado y solucionador de Trump.

En la reunión, el Sr. Pecker le dijo a Trump que sería sus "ojos y oídos".

Michael Cohen testificó que, al enterarse de que la señora Daniels planeaba vender su historia, Trump le dijo: "Esto es un desastre, un desastre total. Las mujeres me van a odiar.

"Esto es realmente un desastre. Las mujeres me odiarán. Chicos, piensan que es genial. Pero esto va a ser un desastre para la campaña".

Posteriormente, Cohen pagó a la Sra. Daniels $130,000 (102,000 libras) para comprar y enterrar la historia.

Críticamente, testificó que lo hizo bajo la dirección de Trump, colocando al ex presidente en el corazón de la conspiración.

Pagar dinero silencioso no es ilegal - el crimen fue la forma en que Trump reembolsó su 'Mr Fix-It' y la razón por la que se pagó el dinero.

Después de que Trump fuera elegido presidente, le pagó a Cohen $420,000 (£329,000) que representaban los $130,000 (£102,000) y otros pagos y bonificaciones, "en bruto" para dar cuenta de la deuda tributaria.

El reembolso se efectuó mediante una serie de cheques, que se contabilizaron como gastos jurídicos.

Ese fue el crimen -la falsificación de registros comerciales, agravada por la razón- el esfuerzo por ocultar a los votantes una historia negativa que podría haber perjudicado las posibilidades electorales de Trump.

En palabras de la fiscalía, se trataba de "una conspiración planificada, coordinada y de larga duración para influir en las elecciones de 2016".
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