#1 En efecto ese fue el problema del Challenger, pero no solo fue problema técnico también fue problema humano, y hasta muy altas esferas: el riesgo de las juntas tóricas fue advertido y reportado por ingenieros pero fue ignorado por la dejadez de los mandos de NASA, las prisas por hacer cuantas más misiones del transbordador, no retrasar ninguna, motivos políticos y publicitarios, hasta ese momento había habido varios tripulantes que no eran necesarios en las misiones y cuyo viaje tenía otros motivos, la misma maestra que murió en este lanzamiento, o John Glenn, que por mucho que se justificara con que había sido astronauta, en ese momento era senador y parece que usó mucho su influencia como tal para darse el capricho de un último garbeo por el espacio contra la opinión de muchos en la NASA. En sus memorias el astronauta Mike Mullane fue muy crítico con todo lo que rodeó a este lanzamiento, lo que escribe Richard Feynmann tras su participación en el comité de investigación también es muy aclarador.