#2 A lo mejor lo que hay que hacer es trabajarse uno para así no odiar al resto de grupos sociales. A ver si al combinar a todos los grupos que desprecias al final resulta que es un 90% de la población . Entiendo que es difícil llegar a eso de conocerse porque odiar a los libros de autoayuda también está de moda
Los blancos a los negros, los hombres a las mujeres, los viejos a los jóvenes, los que tienen carrera a los que no, los de un país a otro, los tragacionistas a los negacionistas, los de derecha a los de izquierda y así hasta el infinito.
Concretamente respecto a las generaciones jóvenes SIEMPRE ha sido así, siempre han sido terribles e iban a suponer el fin de los tiempos. Qué pereza... Lo más irónico de todo es que los que se quejan de las generaciones jóvenes son precisamente los que las han creado, tanto literal como metafóricamente.
#4 me ha parecido muy curioso el orden de los factores en el mensaje que has escrito.
Porque quitando casos puntuales, que los hay y habrá siempre, a día de hoy, el flujo de odio suele ir en sentido contrario al que has reflejado.
Los blancos a los negros, los hombres a las mujeres, los viejos a los jóvenes, los que tienen carrera a los que no, los de un país a otro, los tragacionistas a los negacionistas, los de derecha a los de izquierda y así hasta el infinito.
Si el odio fuese mutuo, tal vez daría igual, pero viendo el mundo con estos ojos que dios me dio...
#6 Vuelvo a estar confundido. En tú primer párrafo indicas que ya habías pensado en que alguien podría reseñar tus palabras y cuestionar si no sería al revés también. Y por tanto un posible "y viceversa", hubiese completado mejor tu exposición. Por lo tanto, indicas que hay una corriente de odio de A hacía B. Y que es posible que exista una corriente contraria de B > A, y tal vez deberías indicarlo. Hasta ahí todo correcto. Ej. Hombres odian a mujeres. ¿Tal vez mujeres odian a hombres?
Pero acto seguido indicas que no estás seguro de que en todos los supuestos, se pueda dar esa reciprocidad. Con lo cual, estimas que sólo un grupo de algunos pares es susceptible de odiar, pero no de recibir odio. Bien, discutible, pero mantiene una lógica. Ej. Hombres odian a mujeres, pero mujeres no pueden odiar a hombres.
Ahora bien, en la segunda parte de tu escrito, deniegas completamente, ya no sólo mi comentario, si no el que acabas de escribir tú y el anterior que abre este debate. Ej. Nadie odia a nadie.
¿Cómo es eso posible? ¿Hay una corriente de odio identitario, o no la hay? ¿Si la hay, en qué sentido? ¿Sólo en uno, en ambos, es multilateral?
#7 Qué forma de complicar las cosas... Si me quieres acusar de algo dilo y acabamos antes. No he dicho que no esté seguro de lo que comentas en el segundo párrafo. Hay odio en todas las direcciones, pero digo que eran ejemplos tontos para ilustrar el odio que hay en la sociedad. No los mencioné para hacer una disertación sobre cada uno de ellos o concretar en qué porcentaje van en una dirección o en otra.
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Los blancos a los negros, los hombres a las mujeres, los viejos a los jóvenes, los que tienen carrera a los que no, los de un país a otro, los tragacionistas a los negacionistas, los de derecha a los de izquierda y así hasta el infinito.
Concretamente respecto a las generaciones jóvenes SIEMPRE ha sido así, siempre han sido terribles e iban a suponer el fin de los tiempos. Qué pereza... Lo más irónico de todo es que los que se quejan de las generaciones jóvenes son precisamente los que las han creado, tanto literal como metafóricamente.
Porque quitando casos puntuales, que los hay y habrá siempre, a día de hoy, el flujo de odio suele ir en sentido contrario al que has reflejado.
Los blancos a los negros, los hombres a las mujeres, los viejos a los jóvenes, los que tienen carrera a los que no, los de un país a otro, los tragacionistas a los negacionistas, los de derecha a los de izquierda y así hasta el infinito.
Si el odio fuese mutuo, tal vez daría igual, pero viendo el mundo con estos ojos que dios me dio...
Ha sido casual, os es tu percepción del mundo?
No hay ningún flujo en ninguna dirección, eran ejemplos chorras.
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Pero acto seguido indicas que no estás seguro de que en todos los supuestos, se pueda dar esa reciprocidad. Con lo cual, estimas que sólo un grupo de algunos pares es susceptible de odiar, pero no de recibir odio. Bien, discutible, pero mantiene una lógica. Ej. Hombres odian a mujeres, pero mujeres no pueden odiar a hombres.
Ahora bien, en la segunda parte de tu escrito, deniegas completamente, ya no sólo mi comentario, si no el que acabas de escribir tú y el anterior que abre este debate. Ej. Nadie odia a nadie.
¿Cómo es eso posible? ¿Hay una corriente de odio identitario, o no la hay? ¿Si la hay, en qué sentido? ¿Sólo en uno, en ambos, es multilateral?
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