#11 Amigo, ¿cuál tontería? ¿Puedes asegurar que ninguno de tus envíos proviene de alguien que pertenezca a algún grupo antivacunas? Estoy seguro que no podrás asegurarlo, porque en ninguno de ellos se va a presentar el comunicante como tal.
#12 Esta tontería: "¿Alguien puede asegurarme que no son gente perteneciente a la iglesia de la cienciología, por ejemplo, secta declarada antivacunas?"
Se hace pesado "debatir" con alguien que no mira lo que se supone que está criticando. Aquí tienes doctores varios dando su testimonio, varios de ellos de renombre, como el cardiólogo Peter A. McCullough (se pueden activar los subtítulos en castellano): www.youtube.com/watch?app=desktop&v=9jMONZMuS2U
La mayor secta que ha habido es la de los covidianos vacunacionistas, están por todos lados, especialmente en el gobierno, en los altos despachos de las organizaciones sanitarias y en los medios de comunicación. Repiten incesantemente que la vacuna es la única salida a esta pandemia y no caen en el desaliento cuando la realidad les tumba sus tesis, puesto que no son tesis, son mitos. Su mito favorito es el de que la vacuna es "segura y efectiva", no lo dejaron de lado ni cuando se dio la paradoja de que los países con un mayor porcentaje de vacunación eran en los que había más brotes de COVID-19. Tampoco cuando los estudios ya han determinado que la efectividad de la vacuna no dura sino unos pocos meses en el mejor de los casos. Tampoco alzaron la voz cuando se demostró que las células donde el ARN mensajero actúa no se circunscriben a las del músculo donde en teoría te pinchan, sino que el ARNm puede circular por todo el cuerpo y afectar a células en diversas partes de éste, causando daños. Tampoco los verías criticar cómo se estaba vacunando, sin atender a razones, era como dar un caramelo, bueno para todos, como si nunca nadie hubiera tenido un efecto adverso por una vacuna. Es más, no hubo compasión ni con los que de forma probada tuvieron efectos secundarios, también se les criticó --supongo que por dejar mal a la sagrada vacuna, porque no entiendo su lógica, ahí tenemos el caso de Eric Clapton, al que se le puso "bonito" por decir que "gracias" a la vacuna casi se va al garete su carrera musical por los múltiples problemas físicos que le acarreó la segunda dosis--. Por no hablar del debate de si la jeringuilla con la que se aplica vacuna se ha de aspirar o no aspirar: por supuesto, en España no se aspiró, ni hubo debate ninguno, lo que inevitablemente contribuyó a que los contenidos de la vacuna entraran en el torrente sanguíneo, cosa no recomendable. Un detalle que muestra que aquí se dio la vacuna como quien da un caramelo.
Tampoco se quejaron cuando nada justifica que se dé a niños, al contrario, cuanta más gente se vacune y revacune todas las veces que haga falta, mejor, según ellos. Tampoco cuando nada justifica que se dé a personas que ya han padado el virus. Su mundo ideal sería que todo el mundo se vacunase cada 6 meses de manera foraza, porque así, según ellos, nos protejemos todos. ¿De qué, me pregunto? ¿De una gripe? ¿Y con una vacuna diseñada para una variante que ya no existe? Lamentablemente, no se puede hablar con ellos, incluso los hay que han quedado afectados por las vacunas que empero siguen llamándola "segura", que peor hubiera sido el malvado virus. Un virus que si tan peligroso era, curiosamente, sólo valía la vacuna contra él, nada de tratamientos preventivos y tempranos, porque, claro, "no hay nada". Incluso hay padres a los que el hijo se les ha muerto por un efecto adverso de la vacuna y siguen sin abrir los ojos, no se sienten engañados lo más mínimo, tal es el poder de esta secta.
Creo que está bien no olvidar lo que hemos pasado y lo que estamos pasando. Si hubiera algo pálidamente parecido a la justicia, muchos estarían entre rejas.
#13 Como ya te dije, no vamos a llegar a ningún lado. Igual que salieron ese grupo de doctores de renombre poniendo el grito en el cielo, y todo eso que refieres, igual salieron otros doctores de renombre dando información en otro sentido, y otros informes con datos en otro sentido. ¿A quién me tengo que creer? Al final los datos son los datos, y la realidad es que la covid se acaba. Quien quiera que crea que la vacuna ayudó a ello, y quien quiera que piense que fue sólo gracias a las leyes de Darwin.
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Se hace pesado "debatir" con alguien que no mira lo que se supone que está criticando. Aquí tienes doctores varios dando su testimonio, varios de ellos de renombre, como el cardiólogo Peter A. McCullough (se pueden activar los subtítulos en castellano): www.youtube.com/watch?app=desktop&v=9jMONZMuS2U
La mayor secta que ha habido es la de los covidianos vacunacionistas, están por todos lados, especialmente en el gobierno, en los altos despachos de las organizaciones sanitarias y en los medios de comunicación. Repiten incesantemente que la vacuna es la única salida a esta pandemia y no caen en el desaliento cuando la realidad les tumba sus tesis, puesto que no son tesis, son mitos. Su mito favorito es el de que la vacuna es "segura y efectiva", no lo dejaron de lado ni cuando se dio la paradoja de que los países con un mayor porcentaje de vacunación eran en los que había más brotes de COVID-19. Tampoco cuando los estudios ya han determinado que la efectividad de la vacuna no dura sino unos pocos meses en el mejor de los casos. Tampoco alzaron la voz cuando se demostró que las células donde el ARN mensajero actúa no se circunscriben a las del músculo donde en teoría te pinchan, sino que el ARNm puede circular por todo el cuerpo y afectar a células en diversas partes de éste, causando daños. Tampoco los verías criticar cómo se estaba vacunando, sin atender a razones, era como dar un caramelo, bueno para todos, como si nunca nadie hubiera tenido un efecto adverso por una vacuna. Es más, no hubo compasión ni con los que de forma probada tuvieron efectos secundarios, también se les criticó --supongo que por dejar mal a la sagrada vacuna, porque no entiendo su lógica, ahí tenemos el caso de Eric Clapton, al que se le puso "bonito" por decir que "gracias" a la vacuna casi se va al garete su carrera musical por los múltiples problemas físicos que le acarreó la segunda dosis--. Por no hablar del debate de si la jeringuilla con la que se aplica vacuna se ha de aspirar o no aspirar: por supuesto, en España no se aspiró, ni hubo debate ninguno, lo que inevitablemente contribuyó a que los contenidos de la vacuna entraran en el torrente sanguíneo, cosa no recomendable. Un detalle que muestra que aquí se dio la vacuna como quien da un caramelo.
Tampoco se quejaron cuando nada justifica que se dé a niños, al contrario, cuanta más gente se vacune y revacune todas las veces que haga falta, mejor, según ellos. Tampoco cuando nada justifica que se dé a personas que ya han padado el virus. Su mundo ideal sería que todo el mundo se vacunase cada 6 meses de manera foraza, porque así, según ellos, nos protejemos todos. ¿De qué, me pregunto? ¿De una gripe? ¿Y con una vacuna diseñada para una variante que ya no existe? Lamentablemente, no se puede hablar con ellos, incluso los hay que han quedado afectados por las vacunas que empero siguen llamándola "segura", que peor hubiera sido el malvado virus. Un virus que si tan peligroso era, curiosamente, sólo valía la vacuna contra él, nada de tratamientos preventivos y tempranos, porque, claro, "no hay nada". Incluso hay padres a los que el hijo se les ha muerto por un efecto adverso de la vacuna y siguen sin abrir los ojos, no se sienten engañados lo más mínimo, tal es el poder de esta secta.
Creo que está bien no olvidar lo que hemos pasado y lo que estamos pasando. Si hubiera algo pálidamente parecido a la justicia, muchos estarían entre rejas.