Es muy cierto que hace falta una cierta condición mental para afrontar un entrenamiento, especialmente si vas con la errónea idea preconcebida de que en poco tiempo lo vas a notar. Al no ver progresos rápidos pierdes la confianza y el abandono es la opción fácil y la mas común, piensas que para qué matarte a ejercicio si sigues igual.

Por eso yo pienso que lo ideal es plantearte metas cercanas, de fácil consecución, así verás el progreso, y si la condición es de obesidad al principio los avances serán lentos, ya que al cuerpo le cuesta eliminar lo sobrante mucho más al principio que después. Una buena alimentación (reducida en raciones pero completa en nutrientes) siempre ha de ser prioritaria, nunca hacer dieta severa para perder mientras entrenas, tu cuerpo puede estresarse por la carencia de nutrientes y convertir en grasa lo poco que zampes para almacenar recursos. Se ha de beber agua sin pasarse (las reacciones metabólicas requieren de un cuerpo hidratado) y dormir bien, la pérdida de grasa se sigue produciendo cuando duermes si has hecho una buena sesión de ejercicio, pero has de dormir tus horas.
Fuera azucares, fuera harinas refinadas, fuera refrescos.

Y otra, la grasa abdominal es la más difícil de eliminar ya que no hay un ejercicio concreto con el que atacarla, se ha de hacer de forma global, ejercitando todo el cuerpo acabas perdiéndola, pero al principio será "gracioso" cuando tu musculatura abdominal empiece a tonificarse y veas que la panza te crece más, porque el músculo de abajo está empujando a la grasa que lo recubre, pero bueno, se acaba perdiendo.

Ea, el abuelo cebolleta ha hablado