Los CDC admiten en silencio sus fallos en la política contra la COVID-19 | Brownstone Institute [ENG]
Con tantas palabras -y datos- los CDC han admitido en silencio que todas las indignidades de la gestión de la pandemia de la COVID-19 han fracasado: las mascarillas, el distanciamiento, los confinamientos, los cierres y, sobre todo, las vacunas; todo ello no ha servido para controlar la pandemia.
No es que no supiéramos que todo esto iba a fracasar, porque lo dijimos a medida que se desarrollaban los acontecimientos a principios de 2020, que la gestión de la salud pública de este virus respiratorio era casi completamente opuesta a los principios que habían sido bien establecidos durante el período de la gripe, en 2006. La propagación de un nuevo virus con un factor de replicación R0 de aproximadamente 3, con más de un millón de casos en todo el país en abril de 2020, sin ninguna vacuna potencialmente esterilizante del virus a la vista durante al menos varios meses, casi con toda seguridad hizo que esta infección acabara siendo endémica y universal.
