Un militar ruso aterriza su helicóptero en medio de la nada para preguntarle a un camionero cómo llegar a su destino
Los rusos están hechos de otra pasta. Son seres que, al nacer con una botella de vodka bajo el brazo, actúan de una forma diferente. Solo ellos son capaces de meterse con el coche dentro de un aeropuerto y arrasar con todo lo que se encuentran a su paso y también de hacer experimentos muy locos, como por ejemplo mezclar Coca-Cola con nitrógeno líquido. Pero además, también son un poco despistados