Israel fue capaz de "devolver al Líbano a la Edad de Piedra, pero no queremos hacerlo", afirmó.
La frontera entre los dos países ha sido escenario de intercambios de disparos diarios entre las fuerzas israelíes y el grupo libanés Hezbollah, alineado con Irán, desde que estalló el actual conflicto en Gaza el 7 de octubre. Los temores de una guerra en toda regla aumentaron este mes después de que el Primer Ministro Benjamín Netanyahu Dijo que Israel se estaba preparando para “una operación muy tensa” en la frontera con el Líbano.
El jefe de Hezbolá, Hassan Nasrallah, también ha amenazado con una guerra “sin restricciones, sin reglas ni límites” en caso de una gran ofensiva israelí contra el Líbano.
El lenguaje de Gallant recuerda a la retórica ya utilizada por Benny Gantz, un ex general y líder del partido Unidad Nacional de Israel que recientemente renunció al gabinete de guerra citando la falta de acuerdo sobre un plan para Gaza más allá de la guerra.
En una serie de videos de campaña antes de las elecciones generales de 2019, Gantz se refirió a enviar al enclave palestino “de regreso a la Edad de Piedra” durante la guerra de Gaza de 2014, una campaña que supervisó como jefe del ejército.
Mientras tanto, el jefe de asuntos humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, calificó al Líbano como “el punto de tensión más allá de todos los puntos de tensión”.
“Está más allá de la planificación. Es potencialmente apocalíptico”, dijo a los periodistas en Ginebra, advirtiendo que una guerra que involucre al Líbano atraería a Siria y otros países.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo a Gallant el martes que otra guerra con Hezbolá podría tener “consecuencias terribles para Oriente Medio” e instó a una solución diplomática.
Un funcionario estadounidense dijo que Washington estaba enfrascado en “conversaciones bastante intensas” con Israel, el Líbano y otros actores, y creía que ninguna de las partes buscaba una “escalada importante”.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano informó sobre 10 ataques israelíes en áreas cercanas a la frontera el miércoles, incluido uno que destruyó un edificio en Nabatiyeh, hiriendo a cinco personas, y Hezbolá reivindicó seis ataques contra posiciones militares israelíes en la región fronteriza.
Gallant también dijo que discutió sus propuestas del “día después” para la gobernanza de la Gaza de posguerra con altos funcionarios estadounidenses. El proceso, que incluiría a palestinos locales, socios regionales y Estados Unidos, sería “largo y complejo”, dijo.
Gallant, miembro del partido Likud de Netanyahu, criticó en mayo al primer ministro por la falta de un plan de posguerra para Gaza (haciéndose eco de las críticas de Estados Unidos).
Si bien el viaje de Gallant a Estados Unidos tenía como objetivo apuntalar el apoyo bipartidista a Israel a medida que aumentan las tensiones con el Líbano, algunos observadores dicen que también es un intento de socavar a Netanyahu un mes antes de que visite Washington, DC y se dirija a una sesión conjunta de la Congreso de Estados Unidos.
La frontera entre los dos países ha sido escenario de intercambios de disparos diarios entre las fuerzas israelíes y el grupo libanés Hezbollah, alineado con Irán, desde que estalló el actual conflicto en Gaza el 7 de octubre. Los temores de una guerra en toda regla aumentaron este mes después de que el Primer Ministro Benjamín Netanyahu Dijo que Israel se estaba preparando para “una operación muy tensa” en la frontera con el Líbano.
El jefe de Hezbolá, Hassan Nasrallah, también ha amenazado con una guerra “sin restricciones, sin reglas ni límites” en caso de una gran ofensiva israelí contra el Líbano.
El lenguaje de Gallant recuerda a la retórica ya utilizada por Benny Gantz, un ex general y líder del partido Unidad Nacional de Israel que recientemente renunció al gabinete de guerra citando la falta de acuerdo sobre un plan para Gaza más allá de la guerra.
En una serie de videos de campaña antes de las elecciones generales de 2019, Gantz se refirió a enviar al enclave palestino “de regreso a la Edad de Piedra” durante la guerra de Gaza de 2014, una campaña que supervisó como jefe del ejército.
Mientras tanto, el jefe de asuntos humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, calificó al Líbano como “el punto de tensión más allá de todos los puntos de tensión”.
“Está más allá de la planificación. Es potencialmente apocalíptico”, dijo a los periodistas en Ginebra, advirtiendo que una guerra que involucre al Líbano atraería a Siria y otros países.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo a Gallant el martes que otra guerra con Hezbolá podría tener “consecuencias terribles para Oriente Medio” e instó a una solución diplomática.
Un funcionario estadounidense dijo que Washington estaba enfrascado en “conversaciones bastante intensas” con Israel, el Líbano y otros actores, y creía que ninguna de las partes buscaba una “escalada importante”.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano informó sobre 10 ataques israelíes en áreas cercanas a la frontera el miércoles, incluido uno que destruyó un edificio en Nabatiyeh, hiriendo a cinco personas, y Hezbolá reivindicó seis ataques contra posiciones militares israelíes en la región fronteriza.
Gallant también dijo que discutió sus propuestas del “día después” para la gobernanza de la Gaza de posguerra con altos funcionarios estadounidenses. El proceso, que incluiría a palestinos locales, socios regionales y Estados Unidos, sería “largo y complejo”, dijo.
Gallant, miembro del partido Likud de Netanyahu, criticó en mayo al primer ministro por la falta de un plan de posguerra para Gaza (haciéndose eco de las críticas de Estados Unidos).
Si bien el viaje de Gallant a Estados Unidos tenía como objetivo apuntalar el apoyo bipartidista a Israel a medida que aumentan las tensiones con el Líbano, algunos observadores dicen que también es un intento de socavar a Netanyahu un mes antes de que visite Washington, DC y se dirija a una sesión conjunta de la Congreso de Estados Unidos.