"A pesar de que Peter Wilson pudo demostrar que se encontraba a 120 millas de distancia en el momento de su muerte, la policía lo interrogó durante siete horas, le tomaron las huellas dactilares, lo fotografiaron y le tomaron muestras para detectar residuos de disparos. En la muerte de Sand no había habido ningún arma involucrada.

“Una hora y media después de descubrir su cuerpo, yo estaba en la estación de policía. Estaba aturdida. En el momento en que más necesitaba consuelo y apoyo, fui sometida a esta experiencia realmente difícil”, dijo Wilson"