Mala información, topos de Puigdemont y pocos reflejos: las claves del gran fiasco de los Mossos
La policía autonómica dice en un comunicado que el "principal objetivo" era "el buen desarrollo del pleno" de investidura y niega un acuerdo con el fugado para detenerlo tras el mitin. Los Mossos d’Esquadra firmaron este jueves uno de los peores días de su historia. Tras siete años fugado, el expresidente de Cataluña Carles Puigdemont regresó a Barcelona, dio un mitin que había anunciado días antes y desapareció entre la multitud sin ser detenido ante los ojos de todos.