La razón principal para utilizar el estado de alarma radica en que «es una previsión constitucional». Esta situación, subrayan, es competencia nacional porque afecta a varias comunidades autónomas. En consecuencia, el Estado tiene la obligación de coordinar su respuesta ante la emergencia. «Las circunstancias actuales superan la capacidad de respuesta de las seis comunidades autónomas implicadas (Castilla-La Mancha, Valencia, Murcia, Andalucía, Cataluña y Aragón), por lo que no se prevé que estas comunidades se reúnan para establecer convenios entre ellas para abordar esta situación.