Aquí hay varios niveles de sorpresa. Es lo que pasa cuando se oculta la realidad por tanto tiempo, que se acumulan los temas. Lo que de aquí se puede extraer es lo siguiente:
- alguien tiene OVNIs en custodia
- quien los haya creado no parece ser de este mundo
- se están estudiando, entre otras cosas para ver cómo consiguen "volar"
- hay mucha física que nos falta por descubrir (manipulación de ondas gravitacionales, algunas cosas tildadas de imposibles se volverían posibles)
- podría ser la solución definitiva al problema de la energía a nivel mundial (algo que no interesa a nadie con poder)
- o sea, tenemos pruebas de físicas, de... ¿alienígenas?
- ¿qué otros seres habitan en el universo? (de hecho, pensar en el universo me paree reduccionista, hay otra realidad no física, según nuestros estándares, que también está por ahí, y no se ve por telescopio ni por microscopio)

Si te paras a pensarlo es brutal lo que un trocito de material desconocido puede revelar. Ojo al detalle de cómo menciona el tal Puthoff el origen de la muestra, se cuida mucho de llamarlo OVNI o platillo volante, hasta este nivel llega el tabú. El tabú que hace que una conferencia sobre metamateriales de origen desconocido no salga en primera plana en todos los diarios. Hay dos ciencias, la oficial y luego la secreta.