Un anciano de 98 años llega al médico para su chequeo de rutina. El doctor le pregunta como se siente.
- Nunca me he sentido mejor, le responde, - Mi novia tiene 18 años.Ahora esta embarazada y vamos a tener un hijo. El doctor piensa por un momento y dice:
- Permítale contarle una historia: Un cazador que nunca se perdía la temporada de caza salío un día tan apresurado de su casa que se confundió tomando el paraguas en vez del rifle. Cuando llega al bosque se le aparece un gran oso. El cazador levanta el paraguas, apunta al oso y dispara. ¿A qué no sabe que pasó?
- No se, responde el anciano.
- Pues el oso cayo muerto frente a él, concluye el doctor.
- Imposible..., exclamo el anciano, alguien más debe haber disparado.
- A ese punto quería yo llegar...
Un anciano de 98 años llega al médico para su chequeo de rutina. El doctor le pregunta como se siente.
- Nunca me he sentido mejor, le responde, - Mi novia tiene 18 años.Ahora esta embarazada y vamos a tener un hijo. El doctor piensa por un momento y dice:
- Permítale contarle una historia: Un cazador que nunca se perdía la temporada de caza salío un día tan apresurado de su casa que se confundió tomando el paraguas en vez del rifle. Cuando llega al bosque se le aparece un gran oso. El cazador levanta el paraguas, apunta al oso y dispara. ¿A qué no sabe que pasó?
- No se, responde el anciano.
- Pues el oso cayo muerto frente a él, concluye el doctor.
- Imposible..., exclamo el anciano, alguien más debe haber disparado.
- A ese punto quería yo llegar...